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MÉRIDA, Yuc.- De los hospitales públicos, así como centros de salud, clínicas públicas y privadas del sureste del país se recolectan al año mil 500 toneladas al año de desechos biológicos infecciosos.

Se cuentan:

• Órganos humanos
• Piel
• Sangre
• Placentas
• Miembros ampuntados
• Gasas
• Algodones
• Jeringas

Directivos de Ecológica del Mayab, única empresa dedicada al Manejo Integral de Residuos Peligrosos Biológico Infecciosos (RPBI) en el sureste del país, informó más del 80 por ciento de RBPI es de instituciones públicas de salud.

Los desechos patológicos, es decir, los órganos, restos de partes amputadas, placentas, trozos de piel, residuos humanos, sangre, cultivos y cepas, son incinerados a temperaturas de hasta mil 200 grados y los restos son llevados a Nuevo León a un relleno especial para ese tipo de desechos.

La mayor cantidad de residuos corresponde a los llamados “no anatómicos”, es decir, materiales de curación y todo tipo de desecho utilizado en la atención de los pacientes, los cuales son sometidos a un proceso de esterilización y trituración.

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En góndolas de 500 kilogramos se depositan los residuos, mismos que son sometidos a una temperatura de 130 grados y presión de tres kilogramos por metro cúbico para su esterilización, trituración y posterior traslado al relleno sanitario.