Jorge Moreno/SIPSE
MÉRIDA, Yuc.- Hoy decidí hablar sobre una persona que aunque se nos adelantó en el camino en octubre de 2005, su vida dedicada a la investigación sobre ovnis en Yucatán ha dejado profunda huella.

Me refiero al capitán Irving Peña Vidal, tabasqueño de nacimiento pero yucateco por adopción, quien en sus últimos años de vida fue pieza clave en el fenómeno OVNI en todo el sureste del país gracias a sus conocimientos y a sus contactos.

Además, tenía una herramienta muy importante, diríamos clave en el tema ovnis. Él era piloto aviador con más de 20 años de experiencia y en sus últimos años de vida laboró como maestro en una escuela de aviación en Mérida, por lo que casi a diario realizaba vuelos con sus alumnos y al mismo tiempo estaba pendiente de reportes de ovnis.

Recuerdo que cuando se dio la famosa oleada en Ticul en el año 2004 (tema del cual hablamos la semana pasada) el capitán Peña realizó varios viajes en esa zona e incluso nos invitó a hacer los recorridos, de hecho pudo captar en una foto una supuesta nave espacial en el horizonte, a plena luz del día.

El capitán Peña cubrió varios avistamientos y reportes en Yucatán, fue fundador y director de FIEPAL (Fuerza de Investigación Espacial y Paranormal de América Latina), así como colaborador del programa de radio “La Hora Macabra” (2003 y 2004), en donde tenía precisamente la sección de ovnis.

En aquel tiempo yo apenas iniciaba en la investigación paranormal y el tema ovni y pude aprender muchas cosas del capitán, sobre todo de este último tema; por un tiempo, semanalmente nos invitaba a una quinta que tenía en la carretera a Tixpéual, que al estar alejada de la “civilización” era un punto perfecto para que con sus telescopios tratáramos de buscar avistamientos de ovnis.

A estas reuniones también acostumbraban ir sus colegas pilotos, así como contralores de tráfico aéreo, quienes contaban sus experiencias sobre los ovnis que habían podido avistar mientras volaban en sus aviones o bien desde la torre de control de diversos aeropuertos.

El capitán Peña fue colaborador de la revista Misterios y precisamente su última investigación antes de recaer y retirarse (padecía cáncer) la hicimos juntos, en montes del municipio de Muna, cerca de unas plantaciones de chile habanero, donde se encontraron huellas en el piso de un aterrizaje ovni.

También participó como ponente en eventos de talla internacional, como lo fue el Congreso Mundial Ovni celebrado a principios de los años noventa en Acapulco, Guerrero.

Vaya pues un pequeño homenaje a través de estas líneas a la trayectoria de este investigador de ovnis, en las próximas semanas les platicaré sobre algunos de los casos que cubrió en los municipios de Yucatán.