|
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram

En nuestros días, cuando requerimos de un servicio, una de las primeras acciones que realizamos al llegar al lugar o persona que lo oferta es verificar la existencia de diplomas o cualquier evidencia documental sobre la formación del servidor y su capacidad certificada para con seguridad confiar nuestro cuerpo o bien material a su atención. Cuando de salud hablamos, en México tenemos cerca de 200 mil médicos, de los cuales 6 de cada 10 son generales y los demás especialistas.

La capacitación de los médicos, después de terminar la carrera, responde a la necesidad, de dominar determinado número de enfermedades. Tenemos que ser expertos y conocer a detalle las particularidades que definen los tejidos y órganos de nuestro cuerpo.

Para lograr el reconocimiento académico, no solo de una facultad o institución, se requiere que al terminar la formación presentemos examen ante los consejos conformados por especialidades. A estas alturas, amable lector, yo te preguntaría si conoces por qué y para qué existen estas estructuras doctas, reconocidas por instancias educativas federales.

Abundando en la materia, te comento que se trata de cuerpos colegiados, formados por prestigiados y probos representantes de la comunidad y profesionales de la misma disciplina, elegidos por sus propios pares para establecer los procesos de certificación y recertificación periódica de sus compañeros con base en requisitos de preparación y adiestramiento en cada campo de la práctica médica y demostración de competencias. La razón de los consejos es constatar la calidad de preparación para el ejercicio de un campo específico de la medicina. Con ello garantizamos a los enfermos la certeza de que están en manos de alguien con el conocimiento de un área y reconocimiento de quienes estudiaron la misma especialidad.

Estos consejos son asociaciones civiles, cuyas funciones no se sobreponen a la correspondiente a sociedades, colegios o academias, ni con las instituciones de educación superior u organismos gubernamentales; tienen marco normativo que les atribuye funciones específicas para realizar actividades de formación, educación continua, desarrollo o de registro y autorización de su práctica. O sea cada organismo no se sobrepone, más bien son complementarios e interrelacionados.

En algún momento te toparás con noticias que hacen alusión a la obligatoriedad de mantenerse avalados con la certificación o la recertificación y que sepas que tu vida y de tus seres queridos está en manos de un “verdadero” experto.

Lo más leído

skeleton





skeleton