El mundo va evolucionando a tal velocidad que no hemos acabado de entender la nueva tecnología que adquirimos cuando ya es obsoleta. En nuestro negocio, trabajo y en la vida diaria tenemos que estar en constante aprendizaje e innovación para poder mantener el paso y el ritmo del mundo actual.

No solo la tecnología va avanzando, también las habilidades, sobre todo en el área laboral las empresas están sufriendo constantemente por no contar con talento en las áreas nuevas que tienen que desarrollar, y muchas veces tu trabajo depende más de tu capacidad de adaptación que de los conocimientos que tienes.

No te puedes quedar atrás, tenemos que estar en constante aprendizaje y desarrollo de habilidades, pero debemos de tener cuidado en no explorar demasiadas opciones porque si queremos especializarnos en 50 cosas diferentes acabaremos siendo maestros de nada.

Decía Carlos Monsiváis: “No sé si no entiendo lo que está pasando o si ya pasó lo que estaba entendiendo”. La automatización va reemplazando muchas actividades y no sabemos cuál será el siguiente paso, por lo que lo más importante es desarrollar nuestra capacidad de aprendizaje y de adaptación de manera que siempre podamos desarrollar nuevas habilidades y aprender nuevos conceptos.

Hoy las empresas ya no buscan conocimientos, las áreas de mayor interés de habilidades son el servicio al cliente, colaboración y resolución de problemas, comunicación y organización.

En el aprendizaje no debemos olvidar el factor humano, no te capacites solo en áreas técnicas o en nuevas tecnologías, aprende a hablar con las personas que han estado por más tiempo en trabajos semejantes y aprende a observar a los que trabajan contigo para poder desarrollar nuevas habilidades.

Lo único que tenemos seguro es el cambio, el cambio es constante, y para adaptarnos mejor a él hay algunos consejos básicos como: complementa tu información, busca fuentes de información diferentes, no te conformes con las opciones que Google te ofrece; lee libros, habla con personas, investiga, toma cursos.

El aprendizaje es una labor continua. Inscríbete en muchos proyectos diferentes, no te limites solo a tu área de trabajo o a lo que ya sabes hacer, aprende a trabajar en equipo y a organizar los diferentes talentos.

Al ver a las personas que dan conferencias o a los expertos en temas determinados, parecería que siempre tuvieron el conocimientos, pero en realidad los líderes y los expertos no nacen, se hacen.

Trabaja en ser el tipo de persona que quieres ser. Tal vez tu objetivo no es empresarial sino solamente personal. De cualquier manera, es mejor desarrollar tu autoestima adquiriendo nuevas habilidades y encontrando el uso que éstas tienen para el bien común.

Nunca olvides regresarle a tu entorno las bendiciones que has obtenido, esto aplica al medio ambiente, a tu sociedad, a tu empresa o a tu familia.

La vida va cambiando, y lo que pensaste que no harías jamás, es tal vez hoy tu mejor opción; no cierres tu mente, ábrete a todas las posibilidades, el mundo de hoy ofrece miles de opciones para cada una de las personas para desarrollar su inteligencia y sus habilidades.

Si ya tomaste una decisión que te llevó a un mal lugar, no tienes por qué quedarte ahí, puedes evolucionar, cambiar, moverte, no solo el mundo está cambiando, tú también, a cada minuto.

No olvides tus sueños, pero a veces los sueños cambian y no tienes que aferrarte a algo que decidiste hace años.

La tecnología podrá tomar el papel de muchas labores, pero el toque humano siempre será necesario. Encuentra tu lugar, encuentra tu talento, disfruta lo que haces y no elijas un trabajo por el sueldo que te dará porque solo encontrarás frustración.

Desarrolla tus talentos y que tu meta sea ser mejor persona hoy al dormirte que cuando despertaste, aprender algo nuevo y ayudar a alguien.