¡Hola, 2018!
Antes de conocerte y vivir los 365 días de los que estás compuesto, quisiera confesar que 2017 fue un gran año.
Antes de conocerte y vivir los 365 días de los que estás compuesto, quisiera confesar que 2017 fue un gran año.
Los amores del pasado vuelven cuando menos lo esperas o mejor dicho tú regresas a ellos. Reencontrarme con el altruismo al ir a leerle a pacientes de oncología pediátrica en la UMAE hizo que amigas y amigos se sumaran a estas actividades para encender la luz de esperanza y fe en los corazones de nuestros pequeños lectores a través de esta labor donde las sonrisas y miradas se convierten en nuestra gran recompensa. Cuando te digo que vale imaginar que eres una superheroína o un fuerte superhéroe o ser osito y león a la vez, todo puede pasar si esto lo compartes con niñas y niños cuya imaginación es #Sinlímites.
Comprendí que el tiempo vale oro. Optimízalo, dedícalo a lo que te gusta y apasiona; cuando te pidan 5 minutos, analiza de quién viene, si vale la pena dar más minutos, incluso horas o si sólo es cuestión de segundos para resolver.
Aprendí también que no importan las circunstancias en las que te encuentres; siempre que tengas una actitud positiva, todo saldrá mejor de lo que esperabas. Por poco pierdo el entusiasmo por la vida, ¡qué susto!: mientras me dirigía al camino de mis metas y manejaba la bicicleta de la experiencia, una persona trató de hacerme creer que no podía llegar, que la vía no era esa y por poco le hago caso. Casi me desvío. Sólo fue una piedrita en el camino. La ignoré y seguí.
-¿Y qué piensas hacer en mis días? -preguntó insistente 2018.
-Tranquilo, no comas ansias, te estoy escribiendo lo que fue para que te prepares para lo que viene. “Depende de ti elegir vivir feliz, en abundancia y plenitud”, como diría Maru Medina. Espéralo.
El año 2018 es para los lectores de El poder de la pluma. Gracias a Milenio Novedades por darme la oportunidad de compartir opiniones y entretenerles un rato. Les abrazo con mucho cariño. ¡Feliz navidad y feliz año nuevo!