Ana Hernández/SIPSE
MÉRIDA, Yucatán.- Para fortalecer la rehabilitación de menores víctimas de abuso, personas de diversas zonas de la ciudad concluyeron un curso sobre el tema y se comprometieron a continuar su formación para apoyar a quienes fueron afectados por este problema, con la creación de un grupo denominado Equipo Contra el Abuso (Ecai). 

El director de Hogares Maná, Víctor Chan Martínez, destacó  la importancia de quienes tomaron el curso, porque no fueron representantes de instituciones de gobierno, sólo uno fue de una asociación civil, la mayoría eran particulares interesados en tener un conocimiento que les permita apoyar. 

En el auditorio de la Universidad Tecnológica Metropolitana (UTM), anteayer se clausuró y entregaron las constancias a las personas que concluyeron el curso “Prácticas terapéuticas para la rehabilitación de víctimas de abuso”, que presidió Víctor Chan, el rector de esa institución educativa, Ariel Aldecua Kuk; la directora de Atención a Víctimas de la Fiscalía General del Estado, Rosa María Uribe, y el juez segundo de control del Primer Distrito (Mérida), Luis Mugarte Guerrero; la presidenta  de la Red Pro Yucatán,  Ivette Laviada Arce, y el secretario ejecutivo de la Codhey, José Enrique Goff Ailloud.

Ivette Laviada destacó en su intervención el llamado a demandar a las autoridades estatales y federales la incorporación del término padre y madre en la ley general de derechos de los niños, niñas y adolescentes, y otras precisiones que si no se atienden se corre el riesgo de que deje de clasificarse el estupro como delito.

Enfatizó la necesidad de hacer revisiones y ajustes para que el delito contra menores no quede sin castigo. Realizar todas las acciones pertinentes  para no poner a los niños y adolescentes en bandeja de plata a los delincuentes. 

Síntomas

• Cuando los niños comienzan a manifestar desgano, bajas calificaciones, temor ante la llegada de la noche e incluso incontinencia, los padres de familia deben hablar con ellos para tratar de investigar qué sucede. 
• Algunos de esos síntomas son reflejo sufrir algún abuso o tiene algún otro problema que debe ser atendido. 
• También se recomienda a los adultos que cuando el menor "hable", no lo interrumpan, tampoco se le debe acosar con preguntas, deben dejar que hable y darle la confianza de que lo apoyarán en todo momento.

Trabajo en conjunto con la familia

Asimismo, se aseguró que aumentaron las denuncias por delitos contra menores de edad en todo el Estado. Es un problema general en las zonas rurales y urbanas, dijo Rosa María Uribe Díaz, directora de Atención a Víctimas de la Fiscalía General del Estado. 

Indicó que el trabajo que realizan poco a poco se amplió, pues además de trabajar con los menores también orientan a los padres y familiares que hacen el acompañamiento.

Existe además apoyo legal e incluso integran las carpetas para subir a juicio, así como apoyar a las víctimas desde el punto de vista psicológico.

Entrevistada en el marco de la clausura del curso, la funcionaria indicó que aunque no tenía las estadísticas a mano, sí detectaron un repunte que considera es de un 10% de casos, en comparación con el año pasado.

Indicó que el abuso es generalizado generalmente son agravios contra menores que no llegan a la adolescencia, pero también ocurrió con adolescentes.

El problema es general en zonas urbanas y rurales, pero en el caso del interior del Estado, algunas “prácticas tradicionales” de las familias ya se denuncian, porque las personas entienden que no es "normal".