El 'oro verde' de Yucatán: el henequén (Ki)

Los mayas usaban la fibra de este agave para hacer sogas y alfombras, lo cual no ha cambiado mucho hoy en día.

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Artesanías elaboradas con fibra de henequén, un producto típico de Yucatán. (SIPSE)
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Víctor Lizama/SIPSE
MÉRIDA, Yuc.- Por recomendación de mi hijo menor, Gerardo Israel  Lizama, hemos decidido referirnos a una planta muy especial para nuestra tierra yucateca: el henequén. Esta idea surge saliendo del trabajo alrededor de las 11 de la noche, el sábado pasado, de la nueva “Casa del 14” en la calle 60 entre 59 y 61 del Centro Histórico de Mérida.

Pensábamos referirnos a “El árbol de la vida” en la India llamado Moringa, que es una maravilla, pero primero le dimos espacio al antes llamado “Oro Verde”  de Yucatán.

Los mayas usaban el henequén para hacer soga, alfombras, lo cual no ha cambiado mucho hoy en día. Se le conoce igual como la fibra de Sisal, pues de ese bonito puerto se embarcaba y cuando llegaba a Europa o Estados Unidos la gente leía: lugar de origen: Sisal, Yucatán, y consecuentemente así lo identificaban.

Hubo una época en la que el cultivo de henequén tuvo gran auge, convirtiendo el terreno de la península yucateca en uno de los más ricos, codiciados y prósperos del país.

Producto de exportación

Fue a principios del siglo XIX cuando inició su mayor apogeo, se establecieron fábricas, las llamadas haciendas que cambiaron el giro de su producción para establecer grandes plantíos y la mercancía comenzó a exportarse al mundo.

Para 1880, Yucatán era uno de los estados de mayor solvencia económica en México. 

El estado de Yucatán llegó a producir el 90% de las sogas y bolsas usadas en el mundo, dando como resultado la opulencia de los dueños de las haciendas.

Sin embargo, al igual que la plata que se extraía de las montañas de México, el valor del henequén decayó durante la Primera Guerra Mundial y nunca volvió a recuperar la popularidad que anteriormente gozaba.

La llegada del “nylon” y el cultivo de la planta en Brasil, Madagascar, Tanzania y Manila, fueron un enorme golpe a esta excelente industria en Yucatán.

Una manera de que este producto recobre parte de superioridad mundial, es seguramente la atractiva artesanía que se puede crear por las manos mágicas de esta “La tierra del Faisán y del Venado”. 

Mi correo es: [email protected]

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