Jaime Tetzpa/SIPSE
MÉRIDA, Yucatán.- En las últimas semanas, el Centro Histórico de Mérida registra un auge de puestos ambulantes de perros calientes, los cuales se han apoderado de esquinas y lugares destinados a los peatones, sumándose así a los problemas de inseguridad vial y riesgos sanitarios. 

Oficialmente, el Ayuntamiento de Mérida ha emitido 56 permisos para vendedores ambulantes, pero basta con saber que existen más de 60 carros de hot-dogs, que trabajan al margen de salubridad y seguridad, y cada uno de ellos tiene ventas diarias de hasta tres mil pesos.  

El regidor Jorge Dogre Orama reveló que en el caso de los hot-dogs son dos familias las que hacen negocio, ya que los operadores de los carros son empleados y no propietarios.

Agregó que una de las condicionantes para obtener un permiso como ambulante es que se expida a personas de escasos recursos que realizan esa actividad para obtener el sustento diario, mas no a empleados, pero las autoridades no han tomado cartas en el asunto.

El regidor hizo un llamado de atención por el peligro que representa para la salud pública el consumo de esos alimentos preparados en la calle.

Muertos

Por otro lado, el alcalde de Mérida, Renán Barrera Concha, anunció que del 28 de este mes al 2 de noviembre próximo, 80 personas tendrán permiso para la venta de flores, dulces de calaveritas, veladoras, velas y productos relacionados con el Día de Muertos.

El punto de venta de los productos relacionados con el Día de Finados será como cada año en el parque “Eulogio Rosado”, en el centro de la ciudad, porque ahí confluye mucha gente y eso beneficiará a los vendedores.

Respecto a los cementerios Xoclán y General, dijo que en cada uno se instalarán 15 vendedores de flores debidamente autorizados ya que no se permitirá la venta de otros productos en los camposantos.