Cecilia Ricárdez/Milenio
MÉRIDA, Yucatán.- Concebir a sus clientes como amigos, en vez de números en un balance, es la clave para el éxito de la agencia de viajes de los emprendedores Fernando Novelo Méndez y Alma Rosa Hernández Coral, quienes han desarrollado un sistema para dar seguimiento a sus casos, ofrecer opciones especializadas a estudiantes y ampliar el panorama turístico para los visitantes a Yucatán y quienes deseen conocer otros estados o países.

Con una visión global y comprendiendo sus raíces, bautizaron el negocio como Mayan Blue; ambos jóvenes son egresados de la Universidad Tecnológica Metropolitana (UTM), donde adquirieron la visión empresarial práctica e incluso continúan con una estrecha relación con los académicos de la institución para asesorarse y tomar mejores decisiones, pero conscientes de que también de los errores se aprende.

¿Por qué abrir una agencia de viajes?

Alma: Como egresados de la UTM tenemos un perfil más práctico que teórico. Comencé a trabajar en una agencia de viajes y el encargado me dejó toda la responsabilidad, así aprendí.

Después, Fernando y yo hicimos unas prácticas en el gobierno. Luego me salí de la agencia, pero los clientes me buscaban, y vimos que había una oportunidad. Comenzamos el negocio en línea durante un año, posteriormente nos establecimos. Me dediqué a la parte administrativa y Fernando al área de publicidad.

Fernando: Los primeros dos años y medios fueron para reinvertir, y ahora la agencia ya está establecida y es reconocida.

Ambos son licenciados en Administración con dos carreras técnicas, comercialización y desarrollo de proyectos.

¿Qué panorama tienen de la competencia en su sector?

Alma: En cualquier ámbito hay competencia, pero está en uno hacer la diferencia. Vemos a las personas, más que como clientes, como amigos. Antes que lleguen a su destino, les damos la mejor opción, según sus necesidades, y lo enfocamos en lo que pida.

Manejamos el seguimiento, esto es nuestra ventaja competitiva. Siempre hacemos paquetes a la medida y trabajamos con universidades en congresos, atendemos a estudiantes de carreras como turismo alternativo y gastronomía, además propiciamos prácticas de turismo en empresas, en fin, creamos otros canales que la gente pide o propone. Nos especializamos, abrimos el panorama.

¿Con qué capital iniciaron? ¿Fue a través de algún servicio financiero o propio?

Fernando: Trabajamos, ahorramos, compramos primero una lap top y el servicio de internet. Durante el primer año en línea sacamos para ahorrar y crecer del plano virtual a estar establecidos en un local. De 10 clientes que teníamos al principio, ahora tenemos un panorama más amplio, con una cartera de más de 300 clientes y hasta 12 grupos que viajan por eventos sociales o académicos.

¿El factor joven cómo ha influido en su desarrollo?

Alma: Como todo negocio, al principio no veíamos la ganancia. Además, en la primera parte, dividíamos nuestro tiempo con la escuela, luego nos dedicamos al 100 por ciento. Nos sucedió que con los clientes de fuera cerrábamos ventas por teléfono, y cuando por alguna razón coincidíamos en viajes, nos conocían en persona y se sorprendían de que fuéramos tan jóvenes. 

A pesar de eso, tenemos clientes de estados como Tabasco, que sin conocerlos confían en nuestro trabajo.

En la UTM, como desarrollamos proyectos desde el primer año, aprendimos que el tema administrativo debe sustentar el proyecto, nos formaron con una mentalidad de empresario más que de empleados y por eso trabajamos con seriedad, por contratos, facturas, recibo, todo está foliado, la gente puede identificarnos y localizarnos, lo que da garantía.

¿Cuál es su siguiente paso?

Fernando: Abriremos otra sucursal, cada quien dirigiría una, con apoyo de otros jóvenes. Hemos tenido estudiantes de la UTM para sus estadías y seguiremos abriéndoles las puertas por el perfil que traen.

¿Cuáles son los aprendizajes más significativos?

Alma: En el camino hemos aprendido que así como ganas puedes perder, el tiempo es dinero; invertimos mucho en capacitaciones y tenemos que irnos de viaje. Hay operadores que nos invitan, pero es mejor tener nuestro propio plan y proyectos e irnos a conocer, en un fin de semana, hasta 20 hoteles.

Hemos tenido fallas, por un error en el sistema o de dedo ponemos mal una fecha… Ahí vamos aprendiendo. 

¿Cómo enfrentan los errores?

Alma: Hay que tener todo en orden, cuando hay una pérdida grande se debe evaluar por qué pasó y cómo lo resolveremos. Con base en lo que nos ha pasado en años anteriores hemos deducido que debemos tener un fondo para que los errores no nos lastimen las finanzas. Si se planea cambiar equipos de cómputo, hay que comenzar a ahorrar y prevenir, especialmente por las temporadas bajas. 

Viajes seguros

• Ofrecen opciones especializadas a estudiantes y ampliar el panorama turístico para los visitantes a Yucatán y quienes deseen acudir a otros estados o países.