Jorge Moreno/SIPSE
MÉRIDA, Yuc.- La ciudad de Valladolid es cuna de infinidad de fenómenos paranormales que han ocurrido, y continúan ocurriendo, tanto en su centro histórico como en las nuevas colonias y fraccionamientos, por lo que los reportes son continuos y debido a eso hemos tenido oportunidad de investigar decenas de casos en la llamada “Sultana del oriente”.

Apariciones de un monje fantasmal en el convento de San Bernardino de Sienna, aluxes en casas de la colonia Fernando Novelo, apariciones y brujería en el famoso cenote Zací, la aparición de un alma en pena en una habitación de conocido hotel, son tan sólo algunas de las investigaciones realizadas y con resultados sorprendentes.

Hoy les hablaré sobre “Las estatuas vivientes”, es decir, cinco monumentos que se ubican en la llamada “avenida de los monjes” y que de acuerdo con varios testigos, han visto que de pronto se mueven solas. Las estatuas están en la entrada de la ciudad, en el camellón central de la avenida a lo largo de aproximadamente 250 metros de distancia.

Julio Molina, oriundo de Valladolid, cuenta que cuando era scout acampaba con frecuencia frente a esta avenida y que, en al menos tres ocasiones, le tocó ver, junto con sus compañeros, que los referidos monumentos de pronto movieran sus brazos (los subían o bajaban) e incluso, en una ocasión, hasta su coordinador vio como uno de ellos estaba en la parte de abajo.

“Pensamos que se había caído el monje, pero estaba parado, lo que no tenía lógica, y cuando se iban a acercar (estaban a unos 20 metros de distancia) éste se subió lentamente a su pedestal. Fue un shock muy fuerte para nosotros”, dijo.

Testigos sin querer

Esto mismo ha sido visto por otras personas, uno de nuestros entrevistados, quien labora en el mercado y todos los días pasa por ahí.

“vi dos frailes que bajaban de su base y estaban platicando, a pesar de la neblina los pude ver y comprobarlo cuando, al pasar junto a las bases, vi que estaban vacías”, aseguró.

Por su parte, la señora Marcelina, quien se dedica a vender fritangas, recordó casi llorando lo siguiente: “Cada vez que cierro los ojos no los puedo olvidar, es como si los siguiera viendo. Recuerdo que la primera vez que los vi era de madrugada. Me iba con mi triciclo del parque de Sisal hacia esa avenida para llevar mi venta a una maquiladora, eran como las cuatro y media de la madrugada. Las luces estaban prendidas y vi a dos personas claramente, estaban platicando en el otro carril, pensé que era gente normal, luego avance y vi a otra persona más, hasta lo saludé, y conforme sigo avanzando me doy cuenta que la base en donde debía estar cada uno de los frailes ya no había nada, pensé que por el sereno no se veían las figuras, pero yo estaba muy cerca y lo confirmé, eso me dio muchísimo miedo”.

Y agrega: cuando llegué al final de la avenida esperé a que amananeciera, en eso pasaron otras personas y me acerqué junto con ellos, pues ya estaba más claro y me di cuenta que todos los frailes ya estaban en sus bases, en donde vi a dos de ellos platicando sólo había unas hojas secas tiradas en el piso, me fui a mi casa a rezar, ese día ya no vendí, me dio mucho miedo y desde eso ya no paso por ahí”.

Un par de policías también han sido testigos de esto: “Nos van a tachar de locos si declaramos públicamente lo que hemos visto de las estatuas, quizás están malditas o no sé, pero de que se mueven y se bajan, eso es verdad, estamos seguros, no nos lo contaron, lo vimos”, finalizaron.

Por otra parte, recuerdo a todos los lectores que este sábado 9 de marzo se realizará en Huhí la conferencia de la gira paranormal donde presentaré 20 videos con mis mejores casos y evidencias, y la próxima semana toca turno a Tecoh (sábado 16).