William Sierra/Milenio Novedades
MÉRIDA, Yuc.- Ante las nuevas corrientes de la vida moderna, es necesario fortalecer la identidad de la familia, como formadora de valores; necesitamos que en México, cómo lo ha hecho muchos años, los conserve y transmita a las siguientes generaciones, expresó Jesús Ramos Álvarez, quien junto con Blanca Sastre Cancino, presiden a nivel nacional el Movimiento Familiar Cristiano (MFC).

El dirigente, quien llegó a esta ciudad para presidir la reunión del bloque cinco del MFC, expresó que cuando la familia deja de ser transmisora de valores, el tejido social se va desbaratando y se cae en situaciones que afecta al país. No sólo debilita la parte espiritual, sino también la vida comunitaria y surgen situaciones como delincuencia, alcoholismo, drogadicción, embarazos a temprana edad.

“Es difícil obtener ciudadanos responsables que caminen de acuerdo con los valores de familias separadas, disueltas o que viven en conflictos. México cuenta con amplia tradición familiar, aunque hoy está siendo desafiada. Vemos con preocupación los altos índices de divorcios e igual que los hijos dejan el seno familiar muy pronto”, indicó.

Ante esa situación mencionó que México tiene que recurrir a sus tradiciones, a lo que sabe que funciona como son sus raíces.

“Ante este mundo que cambia y evoluciona es necesario poner las raíces en tierra firme, que nos permita crecer de manera sólida. México sabe que esa roca sólida es Jesús, pues mediante él podremos demandar las necesidades y retos que la sociedad actual demanda”, añadió.

Ramos Álvarez dijo que es necesario que México no se vea sorprendido ante los cambios del mundo.

“En el tema de educación se proponen asignaturas, programas y maneras de pensar que no son naturales en el país, incluso algunos que no son ni naturales. Ahí tenemos la ideología de género, que se está intentado, sin consentimiento de los propios padres, de introducir en el sistema educativo a muy temprana edad, cuando los niños aún no están con la capacidad de entenderlo”, expuso.

“Podemos levantar la voz en la Cámara de Senadores u otras plataformas para expresar el punto de vista de los padres, aunque la mejor acción a realizar es, que desde el seno familiar promuevas los valores. Tú educa desde tu casa y no dejes que corrientes internacionales se vuelvan sobre tu familia y traten de educar a tus hijos de una manera en que tú no lo harías”, manifestó.

“Otra acción que están promoviendo son las relaciones entre personas del mismo sexo, más allá de lo que debería de ser. Ellos ya han ganado y con justo derecho, la posibilidad de mantenerse con un contrato social, pero entre eso y querer pensar que la familia puede estar basada entre personas de un mismo sexo hay un abismo”, indicó.