MÉRIDA, Yuc.- Un juez de control suspendió el proceso en contra de una doctora panameña acusada de violencia familiar y lesiones contra un niño yucateco que adoptó en 2014. A cambio tendrá que pagar 70 mil pesos y se le prohibió acercarse al menor, además de otras sanciones.

La situación comenzó cuando en abril del año pasado, la doctora E. S. R. D., de nacionalidad panameña, fue detenida en el fraccionamiento Rinconada de Chuburná por agentes de la Secretaría de Seguridad Pública, ya que los vecinos denunciaron que el menor adoptado, en ese momento con nueve años, era golpeado con un palo de escoba además de que constantemente había sido sometido a severas golpizas e insultos.

Por lo anterior, la doctora fue presentada ante el juez primero de control de Mérida, Antonio Bonilla Castañeda, quien en ese momento la vinculó a proceso por los delitos de violencia familiar y lesiones, denunciados por abogados de la Procuraduría de la Defensa del Menor y la Familia.

En la causa penal se menciona que el menor fue adoptado en diciembre del 2014 y ambos vivían en un predio en el fraccionamiento Rinconada de Chuburná. Apenas a la semana de la adopción, la extranjera comenzó a ejercer violencia física y verbal contra el menor, al grado que le pegaba con palos de escoba, o le propinaba golpes con los puños, entre otras situaciones sumamente fuertes. 

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Hartos de esta situación, los vecinos decidieron denunciar, sin embargo, a un año de su detención, la defensa solicitó la suspensión del proceso, a lo que el juez Castañeda accedió bajo las condiciones de que la panameña pague la cantidad de 70 mil pesos por reparación del daño, no acercarse a la víctima, así como recibir tratamiento psicológico y realizar jornadas de trabajo en el Hospital O’Horán.