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MÉRIDA, Yuc.- En el marco de los festejos de Nuestra Señora de Lourdes, este miércoles más de mil fieles de las parroquias que conforman el Decanato 3 peregrinaron hacia la sede parroquial, como signo de unidad y fraternidad del Pueblo de Dios, encabezados por el Arzobispo de Yucatán, Mons. Gustavo Rodríguez Vega, y demás sacerdotes del presbiterio.

Integrantes de grupos apostólicos, centros pastorales y de las pequeñas comunidades eclesiales se reunieron en el parque de “Los Mangos”, ubicado en el fraccionamiento Jardines Miraflores, de donde partieron hacia el templo parroquial en medio de cantos y alabanzas a la Madre de Dios en su advocación de Lourdes.

En su mensaje, Mons. Rodríguez Vega invitó a los fieles, ante la cercanía de la visita del Papa Francisco (12 de febrero) y en el marco del Año de la Misericordia, a ser testigos de un Dios que ama al hombre sin importar su condición y se sientan convocados a participar en la Iglesia, bajo el manto de María como Madre de la Misericordia.

Al respecto, el Pbro. Rolando Castillo Tun, vicario parroquial de Nuestra Señora de Lourdes, dijo que todas las parroquias del Decanato 3, como son San Antonio de Padua, en Granjas; Kanasín, San Rafael, San Miguel, la Rectoría de Nuestra Señora del Rosario y el Santo Niño de Atocha, se unieron como una sola Iglesia para dar testimonio de fe y de esperanza de un pueblo que camina al encuentro del Señor.

“Queremos dar un signo de unidad y fraternidad; también, nos reunimos como Iglesia para dar a gracias a Dios y pedir que la Madre de Dios, en su advocación de Lourdes, siempre nos acompañe y nos impulse a realizar las obras de Misericordia”, indicó.

Informó que el próximo domingo a las 12 del día, el Arzobispo de Yucatán celebrará la misa patronal en la sede parroquial, ya que por motivos de su agenda no podrá acudir el 11 de este mes, fecha en que se conmemoran las apariciones de la Virgen de Lourdes.

Precisó que el miércoles 11 de febrero, a las 6 de la mañana se entonarán las “Mañanitras” a la Virgen; a las 7 am se celebrará misa, a las 8 se rezará un rosario solemne; a las 9 y 10 de la mañana, respectivamente, alumnos, maestros y directivos de los colegios Lourdes y Teresa de Calcuta, acudirán al templo para participar en la celebración eucarística.

Ese mismo día, dijo, a las 11:30 de la mañana se celebrará una misa en la que se administrará el Sacramento de la Unción a personas enfermas, con el apoyo de cuatro sacerdotes, por lo que se invita a la comunidad a llevar a sus familiares que se encuentren en esta situación.

A las 17 horas se celebrará la misa por los comerciantes; a las 19 horas, se oficiará una eucaritía solemne y terminar se realizará una procesión por calles aledañas a la parroquia para concluir a las 21 horas con una serenata a la Madre de Dios.

Claves

• La iglesia de Lourdes se ubica en la calle 65 por 38, en el centro. La primera piedra se colocó el 11 de febrero de 1889 y fue hasta el 9 de febrero de 1908 cuando el templo fue consagrado.
• El inmueble consta de capilla, atrio, ex casa rural y huerta. El templo tiene tres naves, coro, presbiterio, sacristía y un gran salón; destacan los pisos de mosaico, mármol y ladrillo francés

Clausura de Arquidiócesis 

La Arquidiócesis clausuró este miércoles el año de la vida consagrada, con jornadas de oración en cada una de las casas de las congregaciones religiosas que hay en Yucatán

Al respecto, el vicario de la Vida Consagrada, Pbro. Oscar Viñas, señaló que la celebración de la Jornada Mundial de la Vida Consagrada, se celebró por primera vez el 2 de febrero de 1997 y tiene como objetivo “ayudar a toda la Iglesia a valorar cada vez más el testimonio de quienes han elegido seguir a Cristo de cerca mediante la práctica de los consejos evangélicos”.

“Este día quiere ser para las personas consagradas una ocasión propicia para renovar los propósitos y reavivar los sentimientos que deben inspirar su entrega al Señor”, puntualizó.

Explicó que la misión de la vida consagrada en el presente y en el futuro de la Iglesia, no se refiere sólo a quienes han recibido este especial carisma, sino a toda la comunidad cristiana.

En la Arquidiócesis de Yucatán, dijo, la Vida Consagrada cuenta con órdenes, congregaciones, institutos, comunidades y asociaciones de Vida Apostólica. 

“Nuestra Iglesia tiene 52 congregaciones femeninas, que agrupan a 550 personas, y 17 masculinas, que reúnen a  100 varones consagrados, “quienes somos testimonio de vivencia de comunidad, púes cada casa de religiosos se convierte en luz y sal para mostrar que si es posible vivir en familia, hermanos todos”, señaló. 

Indicó que durante la jornada de este miércoles cada congregación religiosa realizó actividades como momentos de oración, talleres de espiritualidad y estudio, así como convivencias que fortalecen el testimonio de luz y alegría para las nuevas generaciones.

“En esta jornada que marca el fin del Año de la Vida Consagrada, todos los religiosos y religiosas renovamos el compromiso de ser memoria viva del seguimiento radical como Jesucristo Pobre, Casto y Obediente”, precisó el P. Viñas.

Objetivo último

Explicó que la finalidad de dicha jornada responde a la necesidad de alabar al Señor y darle gracias por el gran don de la vida consagrada que enriquece y alegra a la comunidad cristiana con la multiplicidad de sus carismas.

Dijo que esta Jornada tuvo como finalidad promover en todo el pueblo de Dios el conocimiento y la estima de la vida consagrada.

“En un mundo con frecuencia agitado y distraído, la celebración de esta jornada anual ayuda también a las personas consagradas, comprometidas a veces en trabajos arduos, a volver a las fuentes de su vocación, a hacer un balance de su vida y a renovar el compromiso de su consagración”, puntualizó.

Claves

• La Jornada Mundial de la Vida Consagrada se celebró por primera vez el 2 de febrero de 1997 y busca ayudar a la Iglesia a valorar el testimonio de quienes han elegido seguir a Cristo mediante los consejos evangélicos
• Durante la jornada de ayer cada congregación religiosa realizó momentos de oración, talleres de espiritualidad y estudio, así como convivencias que fortalecen el testimonio de luz y alegría para las nuevas generaciones.