Jaime Tetzpa/SIPSE
MÉRIDA, Yuc.- Aunque las acciones del SAT contra los causantes no se pueden calificar de “terrorismo fiscal”, debido a que se contemplan en el Código Fiscal de la Federación, son indicadores de que las empresas deben tener más cuidado en el manejo de su información financiera y tributaria para evitar incumplimientos que pudieran ser considerados, en el peor de los casos, como fraude contra Hacienda, que ameriten sanciones penales.

En relación con las nuevas facultades de la autoridad fiscal, que establece el uso del buzón tributario y la contabilidad electrónica, Lucio Jesús Uc Heredia, secretario del sector docente del Colegio de Contadores Públicos de Yucatán, consideró que hay diferentes niveles de incumplimiento con multas que, en algunos casos, resultan excesivas.

Indicó que, en caso de no llevar contabilidad, la autoridad puede asegurar una empresa, determinar responsabilidad solidaria y podría configurar el delito de defraudación fiscal. En dicho caso aplicaría una sanción corporal.

Entre las sanciones específicas en materia de infracciones, dijo, no llevar la contabilidad significaría una multa que podría ser de mil 200 pesos hasta 11 mil 960 pesos, lo cual podría parecer simple pero implica otras sanciones, como perder el derecho a solicitar devolución de impuestos cuando haya saldos a favor.

Libro de registro

No tener el libro o registro especial a que obliguen las leyes fiscales; no cumplir con las obligaciones sobre valuación de inventarios o no llevar el procedimiento de control de los mismos o, en todo caso, llevar la contabilidad en forma diferente a las disposiciones del Código Fiscal de la Federación, podría costar una multa de 260 pesos a cinco mil 980 pesos.

Precisó que no hacer los asientos correspondientes a las operaciones efectuadas; hacerlos incompletos, inexactos o fuera de los plazos respectivos, podría costar una multa de 260 hasta cuatro mil 790 pesos, “por cada una”.

“Si consideramos que una empresa puede realizar hasta tres mil operaciones en un mes y por cada una de ellas debe pagar una multa mínima de 260 pesos, ya se vuelve considerable”, comentó. 

Otras de las sanciones consiste en no conservar la contabilidad a disposición de las autoridades durante el plazo que establezcan, ya que eso le haría acreedor a una multa que va de 730 a nueve mil 560 pesos. 

El especialista recomendó cuidado a los comerciantes, ya que no expedir, no entregar o poner a disposición de los clientes los comprobantes fiscales digitales por internet (CFDI ó factura electrónica) de sus actividades, o expedirlo sin los requisitos señalados por el Código Fiscal de la Federación, representaría para los contribuyentes una multa que va de 12 mil 70 a 69 mil pesos. En caso de reincidencia lo podrían clausurar de 13 a 15 días.

Jesús Uc Heredia destacó entre las penalizaciones más severas la expedición de CFDI, asentando la clave del registro federal de contribuyentes de persona distinta a la que adquiere el bien o el servicio, o a la que contrate el uso o goce temporal de bienes, con una multa que va desde los 13 mil 570 pesos hasta los 77 mil 600 pesos.

Capacitación sobre contabilidad

Por otra parte, más de 40 personas, entre empresarios, contadores, administradores y gerentes, participaron ayer en el primer curso de capacitación sobre la contabilidad por medios electrónicos, actualización necesaria para cumplir con las nuevas disposiciones de la Secretaría de Hacienda, que se imparte en el módulo del Servicio de Administración Tributaria en la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo de Mérida.

El presidente de la Canaco Mérida, José Manuel López Campos, resaltó que esta capacitación forma parte de las acciones que de manera permanente realizará la cámara para apoyar a sus afiliados en el conocimiento, y cumplimiento de las reformas que entraron en vigor en materia fiscal. 

Los cursos de Contabilidad Electrónica, indicó, se impartirán mensualmente, para grupos de 40 personas.