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MÉRIDA, Yuc.- La joven estudiante Dalia Abigail Tun May pasó dos largas horas de angustia al perder su cartera que, en un descuido, dejó olvidada en una banca de la Plaza Grande, pero gracias a la labor de la Policía Municipal y a un honrado ciudadano, la recuperó.

Eran las 11 de la mañana del sábado pasado cuando la alumna de Psicología se sentó en una banca de la Plaza para esperar la hora de salida de su autobús rumbo a Akumal, Quintana Roo, para pasar las vacaciones navideñas junto a su familia.

La joven llevaba en la mano su cartera con 500 pesos, que momentos antes retiró de un cajero automático, para pagar su boleto, comida y demás gastos para el viaje, sin embargo, al levantarse de la banca por descuido dejó el monedero olvidado con el dinero adentro.

Minutos despues, un ciudadano al sentarse en la misma banca vio la cartera y pidió al policía Manuel Jesús Chávez Can que hiciera todo lo posible para regresarla a la propietaria.

El oficial se trasladó a las oficinas de la Policía Municipal de Mérida y la entregó al Departamento Jurídico.

Pasaron alrededor de 40 minutos y la abogada Margarita Cámara Acuña revisó la cartera y entre varias credenciales encontró una que identificaba a la dueña como una estudiante.

Con una copia de la identificación y apoyado por otro agente, se trasladó a esa universidad y en el área administrativa, con los datos de la joven, pudieron contactarla vía telefónica y le avisaron que acudiera a la Policía Municipal de Mérida por su pertenencia.

Cerca de las 13:00 horas, la muchacha se presentó a la corporación y describió ante la abogada las características de su propiedad y la cantidad de dinero que contenía. Como todo coincidió, se le hizo la entregó oficial.

Por su parte, la joven comentó que al darse cuenta de que olvidó su cartera, desesperada regresó al sitio, y preguntó a varias personas, a los tenderos de un puesto de revistas y nadie supo darle información.

La estudiante dijo que estaba muy triste y desesperada ya que con ese dinero se dirigía para comprar su boleto a Akumal.

"Sabía que la iba a pasar muy mal sin mis identificaciones y hasta pensé que ya no iba a ver mi famila en esta Navidad”, dijo.

Dalia se mostró agradecida por la honradez y por el esfuerzo que hicieron todas las personas para recuperar su pertenencia.