Cecilia Ricárdez/SIPSE
MÉRIDA, Yuc.- El arte como un medio para la expresión humana y acto liberador, sanador, es el fundamento de la obra y los talleres impartidos por la artista Elena Martínez Bolio quien durante el programa radiofónico “Salvemos una vida”, explicó los beneficios que otorga la dedicación y el trabajo creativo, artístico en la vida de las personas. 

La conducción del programa radiofónico estuvo a cargo de Adela Canales y Jorge Barrera, quienes invitaron a los radioescuchas a aprovechar este tipo de espacios útiles para la vida.

De acuerdo con datos de la Conaculta, la obra de Martínez Bolio fue elegida entre 12 mil piezas en la Bienal de Artes Visuales VI Bienal Nacional de Artes Visuales Yucatán 2013, en la categoría de instalación expuesta en el Centro de Artes Visuales, donde permanecerá tres meses.

La artista explicó que su obra “Se me ha perdido el mundo y no sé cuándo empieza el tiempo de empezar de nuevo”, aborda la empatía, un valor necesario y en planos urgentes en la sociedad, por lo que plantea un mundo imaginario sin divisiones, donde todos se ponen en los zapatos del otro para comprender y ayudar.

“La instalación está inspirada en una lectura de José Emilio Pacheco, se trata de mapamundi sin fronteras, porque en el mundo estamos cansados de seguir en un pasado, de cargar el peso de guerras, sufrimientos innecesarios, esos dolores que nos han llevado a esclavizarnos, quería en mi fantasía, que éstos fueran eliminados; ahí hay ciertos pobladores, en mi técnica de bordado, seres bordados en puntadas, con expresiones y jugando con las figuras”, abundó. 

Adelantó que está en proceso una exposición en septiembre u octubre, en la que mostrará trabajos realizados con los gremios que labora y con quienes se han generado piezas.

“Entre las personas que he trabajado, tienen mucho que decir, sufrimientos. Mi propuesta personal es que la oración que podemos elevar a los cielos por el otro, no sólo sea registrado en templos, sino apegado al arte, abordado esos temas", explicó.

"El arte siempre ha sido curativo, expresar al ser dentro de mí; el sufrimiento me ha vendido la idea de quién soy en culpa, el dolor autoimpuesto, en eso que me fija al piso y no me deja sentirme libre, con ese principio trabajo con grupos de prostitutas, ancianos, niños con enfermedades terminales y personas con enfermedades mentales, emocionales”, apuntó.

Además de la muestra, se ofrecería una conferencia y un performance actuado por Leonor Medina.

“El arte social que hago cuesta, además las piezas no se venden, sino son itinerantes", indicó.

"Por ejemplo la exposición Las mujeres decentes de la calle 58, se trabajó con un sector de 23 sexoservidoras, una murió y una más está fuera de las calles, haciendo una actividad diferente, eso prueba que aunque ha habido un cambio, aunque sea mínimo también llamó la atención de la gente, en el Macay, Museo textil de Oaxaca, Museo de la Universidad La Salle de León Guanajuato y tenemos una propuesta para exponer en Washington”, apuntó.

Para contribuir a la sociedad a través del arte, Elena Martínez Bolio ofrece los talleres “Los textiles curativos”, bajo el fundamento de Carl Jung, quien planteaba que la sanación entra por la herida, de esta manera en las sesiones los participantes bordan con método de curación, en un textil que signifique algo para ellos, que tenga historia.

“El beneficio es enorme, si partimos de la premisa que expresarnos a veces es algo que causa vergüenza, la pregunta es dónde está el acto inocente de creación, decir lo que sentimos, cualquier sentimiento culposo, así se expresa el dolor y se sutura bordando escribiendo. La misión no es estética, no vamos a ser bordadoras o artistas, sino vamos a exorcizar, a través de nuestro textil. Aquí vamos a deshacer las culpas, sanar heridas”, explicó.

Los talleres tendrán lugar del 14 al 16 de este mes, de 10:00 a 13:00 horas en la calle 4 diagonal, número 160 B x 15 y 17 de Montecristo. Pueden asistir a partir de los 14 años.

Finalmente, recordó al Padre Kemp, que dijo “¡Aguas padres de familia, las principales enfermedades de la sociedad serán emocionales”, por lo que a partir de entonces esa frase ha motivado su trabajo, dijo, “en la formación de nuestros hijos vamos construyendo expectativas que ningún otro ser humano puede, cuando el arte te lleva a lo espiritual, te aleja del dolor. El dolor es inevitable, el sufrimiento es opcional”.