Cecilia Ricárdez/SIPSE
MÉRIDA, Yucatán.- El empresario Juan José Abraham Achach, quien tuvo como base en su proyecto de vida a su familia, un sostenido desarrollo empresarial y el deseo de generar un impacto social positivo en su entorno, fomentó una cultura de trabajo integral para lograr un éxito no sólo en negocios, sino aportar a la educación, la cultura, a los sectores vulnerables y trascender como un agente proactivo en la sociedad.

El actual Presidente del Instituto Promotor de Ferias ejerce su segundo periodo en este organismo, en el que logró, desde sus inicios, que el recinto ferial fuera sustentable, autosuficiente y un punto de recreo para todos los públicos. 

En su trayectoria destaca su labor como parte de agrupaciones empresariales, patronatos de fomento a la educación y consejos consultivos de la Universidad Anáhuac Mayab, Universidad del Valle de México y el Instituto Tecnológico de Mérida, así como su servicio en la presidencia de la Cruz Roja Mexicana; además de ser consejero de instituciones de crédito y un ejercicio político en el Partido Revolucionario Institucional, en el que colabora de manera honoraria. 

La familia, la primera escuela de la vida

Salim Abraham Dáguer (empresario) y Melba Rosa Achach Mena (Mérito al desarrollo comunitario por la Asociación Mexicana de Mujeres Empresarias de Yucatán), padres de Juan José, fueron sus primeros maestros de la vida.

Su padre le enseñó la importancia del trabajo y el esfuerzo para lograr resultados positivos y su madre le inculcó el valor de la familia, ambos con el común denominador de promover la generosidad desde casa y hacia a la sociedad. 

“Desde muy pequeño recibí el apoyo de mi papá, que permitía que parte de mi tiempo de ocio lo dedicara a una actividad que significara formación, trabajo y sentirme útil, y eso hizo que desde muy pequeño me ocupara en oficios”, comentó.

Comentó que tuvo la oportunidad de compartir su tiempo con personas mayores que ya trabajaban en el negocio y que de alguna forma le dejaban algo de enseñanza, desde el operativo hasta el administrativo.

“Así comprendí que la vida es un camino de trabajo, de esfuerzo y que debía tener la orientación adecuada para que todo resultara bien. En tanto, mi madre siempre nos fijó el camino de la importancia de la familia y sus valores, que permiten que uno pueda desarrollarse”, recordó.

Primer contacto con su futuro

Abraham Achach considera que el segundo escalón que en su formación tuvo un gran impacto fue  dejar su tierra a los 15 años para estudiar la prepa y la universidad en Monterrey, es de los episodios más enriquecedores.

A pesar de la lejanía, en cada periodo vacacional regresaba a Mérida a trabajar en los negocios de la familia. 

“Siempre procuré que esta lejanía de mi familia, de mi hogar, fuera debidamente canalizada y aprovechada, y fuera el espejo que permitiera darme cuenta lo que significa verdaderamente el nexo familiar y el apoyo de un padre o una madre…Hay dos decisiones que el hombre debe tomar cuando no está preparado para tomarlas y tienen trascendencia en su vida, son: la carrera y el matrimonio. Para  el tema de la carrera, me asesoré y pude decidir bien”, abundó, al recordar la Licenciatura en Administración de Empresas que estudió.

Con el respaldo de una experiencia laboral desde temprana edad, cuando egresó y volvió a su terruño trabajó en las empresas familiares, en las que a través de los años formaron sus modelos exitosos de negocio, por lo que tuvo que conjugarlos con las ideas nuevas de haber estudiado en una ciudad boyante en el tema empresarial: la vieja y nueva escuela.

Luego de aprender lo mejor de ambos mundos se independizó, y en su trayectoria suma la constitución de 30 empresas relacionadas y agrupadas en diferentes corporativos. 

En su desarrollo formó parte y lideró organismos empresariales, con la visión socialmente responsable.

Agradecer y compartir

Al crecer en una familia de ascendencia libanesa, que empezó de cero en tierra ajena, hasta ser parte crucial de la comunidad, el agradecimiento y el valor de compartir con la sociedad era el pan de cada día, y con ese enfoque forjó su personalidad y carrera, la cual en diferentes momentos la ha combinado con acciones altruistas y a favor de la educación.

De esta manera, presidió el Patronato del Instituto Tecnológico Regional de Mérida, el Patronato de Fomento a la Educación de Yucatán, la Cruz Roja Mexicana en Yucatán, del Deportivo Libanés y es consejero de la Universidad Anáhuac Mayab y Presidente del Consejo de la Universidad del Valle de México en Yucatán.

“Con el tiempo idenfifiqué una teoría, que para ser un líder en el mercado hay que ser un líder social”, reflexionó. 
Impacto social

Su actuación además se movió en los terrenos políticos, cuyo camino comenzó con la amistad de un personaje histórico: Luis Donaldo Colosio, un líder nato que conoció en su época universitaria como compañeros de la comunidad estudiantil y por quien se afilió al Partido Revolucionario Institucional (PRI).

De esta manera se involucró en el tema y ocupó cargos, entre ellos Diputado por Yucatán, Presidente de ese partido y otra serie de comisiones en la institución política, que lo vinculó en la dinámica de este sector. 

“Sigo siendo empresario, al mismo tiempo desarrollo alguna actividad en la función pública, pero para no generar conflicto, lo que hago en la Presidencia del Instituto Promotor de Ferias es totalmente honoraria, ya que no quiero confrontar mi actividad y actitud en los negocios por recibir un emolumento por parte de la actividad pública. También complemento de lo que hecho en mi vida, porque me he dedicado al desarrollo social y esta labor es parte de ese interés”, aclaró.

Recordó que en 1985 tuvo su primera etapa de trabajo en el recinto ferial, la cual duró siete años, en la que se logró que fuera un evento sustentable y autosuficiente.

Su segundo periodo comenzó en 2007 a la fecha y tiene el reto cada año de traer novedades y atracciones que disfrutan las familias sin salir del Estado.

Perfil

• Juan José Abraham Achach nació en Mérida el 18 de marzo de 1951. 
• Padre de familia formada con su esposa Carolina Dáguer Dájer y sus hijos, Juan José, Jacobo, Mauricio y Andrés. Abuelo de tres nietas.
• Golfista desde hace más de 35 años.
• Participó dentro de los organismos intermedios de la sociedad como: 
  • Presidente de la Cámara de Comercio, Servicios y Turismo de Mérida.
  • Vicepresidente de la Confederación Nacional de Cámaras de Comercio.
  • Presidente de la Junta Coordinadora Empresarial de Yucatán.
  • Presidente del Patronato de Fomento a la Educación de Yucatán.
  • Presidente del Instituto Promotor de Ferias de Yucatán.
  • Dentro del sector financiero ha participado como consejero en siete instituciones de crédito.
  • Consejero regional del Banco de México.
  • Consejero regional de Nacional Financiera.
  • Vicepresidente de la Unión de Crédito del Comercio, Servicios y Turismo.
• Reconocimientos:
  • Fue nombrado por ejecutivos de ventas y mercadotecnia como “Ejecutivo distinguido de Yucatán”.
  • Por su labor en la Cruz Roja.
• Actualmente:
  • Presidente de la Comisión de Procesos Internos del PRI.
  • Integrante del Consejo Político Nacional del PRI.
  • Secretario técnico del Consejo Político de Yucatán del PRI.