Coral Díaz/SIPSE
MÉRIDA, Yucatán.- Los casos de hepatitis A aún se encuentran presentes en 18 municipios del Estado, por lo que se mantienen las estrategias preventivas y de notificación inmediata, indicó el secretario estatal de Salud, Jorge Mendoza Mézquita. 

“Tenemos 18 brotes activos en el mismo número de municipios, aunque el número de casos ha disminuido en forma significativa; algunos lugares donde persiste es Mérida, por el número de habitantes que tiene, lo mismo Tizimín, Valladolid y Kanasín”, precisó.

El funcionario enfatizó que si bien los casos disminuyeron de 50 que se presentaban cada semana a unos 10 en las últimas fechas no se debe bajar la guardia; todavía no se sale de la zona de epidemia y se deben seguir las acciones, por lo que se siguen reuniendo con alcaldes y autoridades de diferentes dependencias para planificar acciones.

“Si bien disminuyeron un 47 por ciento los casos respecto al año pasado, todavía no salimos de la zona de epidemia, por lo que las acciones tienen que seguir; en donde nos reportan contagios se deben realizar las acciones. Tenemos 50 reportes a la semana y en las últimas cuatro estuvieron entre ocho y 10, pero no se puede bajar la guardia”, apuntó.

Dijo que esperan que en este primer semestre se salga de la zona de epidemia y se lo han hecho saber a los alcaldes, Comisión Nacional del Agua (Conagua) y Secretaría de Educación del Estado (SEE), entre otros, en reuniones en donde se han expuesto los buenos resultados, pero como parte de una motivación para continuar.

Mendoza Mézquita comentó que, por ejemplo, la Secretaría de Educación genera que se mantengan limpios los tinacos y los baños, y que de manera higiénica se preparen los alimentos que se venden en las escuelas, además de las vacunas contra esta enfermedad en donde se ha requerido.

Agregó que este inicio de año no ha comenzado con lluvias fuertes, lo que hace que exista menos contaminación y un mejor panorama. 

Disminución

• El 2013 se cerró con mil 869 casos, mientras que 2014 con 994, esto significa un decremento del 46.81 por ciento, gracias a acciones como la cloración del agua y promoción de lavado de manos.