José Salazar/Milenio Novedades
MÉRIDA, Yucatán.- Con la confirmación de dos casos más de zika, en la semana epidemiológica 44 (del 28 de octubre al 3 de noviembre), los contagios por esta enfermedad en Yucatán suman 23, de los cuales 16 se han presentado en hombres y siete en mujeres.

La cifra ya supera a la de 2017, que para estas fechas era de 15 casos, misma que se mantuvo al concluir el año.

En esta última semana, de acuerdo con el Boletín Epidemiológico de la Secretaría de Salud, los dos nuevos casos se presentaron en hombres. En el caso de las mujeres que a la fecha han contraído la infección que transmite el mosco Aedes aegypti y Aedes Albopictus (especie de reciente introducción en el estado), dos de estas se enfermaron estando embarazadas.

Muy peligroso para embarazadas

Las mujeres encintas son un grupo riesgo debido a que de contraer zika durante el primer trimestre de la gestación, el producto puede presentar la malformación congénita denominada microcefalia.

Desde que inició la vigilancia epidemiológica de la enfermedad que transmite el mosco Aedes aegypti, a finales de 2015, se han confirmado mil 322 casos en Yucatán, de los cuales 926 se han presentado en embarazadas.

Hasta la fecha, la Secretaría de Salud ha confirmado un solo caso de microcefalia relacionado con zika en la entidad, que se registró en junio de este año y correspondió a un bebé nacido en el Hospital Rural No. 63 del IMSS en Maxcanú. Este caso fue confirmado por el Instituto Nacional de Perinatología. El bebé se encuentra vivo y bajo seguimiento.

En el presente año, se han confirmado 13 casos de microcefalia (siete niños y seis niñas). El año pasado, hasta el mismo corte se habían contabilizado 22 casos de esta mal congénito, sin que ninguno se relacionara con la infección por el virus de zika.

Qué es la microcefalia

Como se ha informado, la microcefalia es un defecto congénito en donde el tamaño de la cabeza del bebé es más pequeño de lo esperado en comparación con el tamaño de la cabeza de bebés de la misma edad y sexo.

Los bebés con microcefalia con frecuencia tienen un cerebro más pequeño que podría no haberse desarrollado adecuadamente. Pueden presentar una gama de problemas adicionales, dependiendo de lo grave que sea esa afección.

La microcefalia se ha asocia a convulsiones, retraso en el desarrollo, como problemas del habla y con otros indicadores del desarrollo como falta de capacidad para sentarse, pararse y caminar, discapacidad intelectual (disminución de la capacidad para aprender y funcionar en la vida diaria), problemas con el movimiento y el equilibrio, problemas para alimentarse, como dificultad para tragar, pérdida de la audición y problemas de la vista.

Debido a que es difícil predecir al momento del nacimiento los problemas que tendrá el bebé con microcefalia, estos necesitarán un seguimiento mediante chequeos regulares para vigilar su crecimiento y desarrollo.