Proyecto Y, crónica de un acierto
Columna de Raúl Gasque: Proyecto Y, crónica de un acierto
Perder el tiempo citando todos los nombres que han transitado en el breve espacio que Proyecto Y ha “fluido” en las venas de la incipiente y a veces irregular escena del arte en Mérida, Yucatán, sería justamente innecesario.
Lo que sí vale la pena es escribir una reflexión de lo que implosiona, remueve, junta y sacude. Proyecto Y, como su nombre lo indica, es un agente de cambio con un caparazón inconcluso que permite partir de lo conocido a lo desconocido. Son pocas veces las que he podido ir a una exposición y mirar lo que es acertado en estas tierras yucatecas.
Esto me pasó con la muestra que actualmente se puede ver en el Centro de Artes Visuales. “Tesis + Injerto” comparte la visión de Catherine Petitgas, Fritzia Irízar y Óscar García. La exposición es un encuentro afortunado de curaduría y experimentación enfocando en arte contemporáneo. Ahí los catorce artistas: Edwin Baas, Andrea Brito, Jairo Campos, Marlin Cortés, HEC RY, Molly Olvera, Ari Malo, Sopa, Yukari Uzeta, Giuliana Aguirre, Gonzalo D. Cerón, David Puc, Fernando Quintero y Alan Toloza dejan en una exposición bien ejecutada una muestra hecha con calidad, visión y sensibilidad. Los recursos de la exposición están perfectamente aprovechados.
Las salas reciben fotografías, obra e instalación que dialogan con intención, pero sin “sobre protagonismo”. Los lenguajes son sinceros. Me fue difícil encontrar obra que me llevara a otras obras de forma obvia.
Cada uno de los artistas logra un discurso bien afinado, valiente y bien ejecutado. Dentro de los artistas y obras que más me gustaron encontré entretejido: nervadura endothelial un acto…. En la exposición hay plantas, sangre, símbolos, imágenes, paisajes en video. Calma, ansiedad. Todo esto lo rodea. Tiempos de hoy sin duda alguna.
En paralelo veo un post en el Instagram de Proyecto Y. Un performance realizado por Marilá Dardot y Ximena Carrillo Andrade. Ahí en un muro intervienen con achiote una forma de poner en énfasis la necesidad de poner duda en los discursos de la “Mérida Blanca”.
Este tipo de intervenciones son un acto de poética que tiene repercusiones intelectuales y políticas en todos los que hemos sido testigos de su ejecución. Aunque sea a distancia se siente y huele el achiote húmedo en muro de cal y ladrillo. El tiempo pasa. La laja se sigue prendiendo. Y el que escribe espera que esa Y se siga propagando en forma y tiempo de un Flamboyán extendido.