Devastada por la pandemia
Alejandro Castro Escalante: Devastada por la pandemia
De “impacto catastrófico” fue la apreciación que el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) hizo sobre los efectos en la educación en la región de Latinoamérica y el Caribe donde hay 114 millones de niños que siguen sin tener educación de manera presencial. Según su último reporte, a más de un año en que comenzó a expandirse el virus del Covid-19, son siete los países en la región que tienen abiertas sus escuelas;en otros doce países las escuelas están totalmente cerradas y, en el resto de la región están parcialmente cerradas. Aunque se han hecho enormes esfuerzos para ofrecer a los alumnos clases virtuales, han sido muchos los factores que han afectado seriamente el logro educativo y la salud mental de los estudiantes en lo que se ha catalogado como la peor crisis educativa que Latinoamérica y el Caribe ha experimentado en su historia moderna. Muchos de esos niños y jóvenes perdieron el final del ciclo escolar pasado y ahora este año de escolarización, cada día adicional sin clases presenciales pone a los niños más vulnerables en riesgo de abandonar la escuela para siempre especialmente de aquellos que no tienen acceso a Internet y no cuentan con el apoyo de sus padres y madres en la casa.
En México, el cierre de escuelas que inició el 23 de marzo de 2020 aún se mantiene y es en este mes de abril cuando en Campeche se reiniciaron parcialmente las clases presenciales en un proceso gradual de reapertura de las escuelas con la vacunación del personal educativo y el semáforo epidemiológico en color verde. En Guatemala, hubo un sistema híbrido de enseñanza, pero los niveles de contagio de Covid-19 aumentaron y regresaron a sólo clases virtuales en casi todo el país pese a las manifestaciones de padres de colegios exclusivospara que a sus hijos se les permitiera volver a los planteles, situación que hemos observado igualmente en México. En Chile pasó algo similar, desde marzo se reiniciaron las clases híbridas y un 30 por ciento de 9 mil 500 escuelas lo hicieron en forma presencial, sin embargo, la totalidad de planteles de Santiago regresó al confinamiento debido a la alta tasa de contagios. Un caso especial es el de Argentina, donde la mayoría de las escuelas tienen clases presenciales con sistema de burbujas desde de febrero, aunque las autoridades advierten sobre nueva ola de covid-19 con el invierno en el hemisferio sur, no consideran suspender nuevamente las clases dado el fuerte impacto negativo que tuvo el cierre de escuelas.
Por su parte, el Salvador y Ecuador, regresaron a las aulas en este mes, a través de un esquema gradual, semipresencial y opcional”, por lo que los padres podrán decidir si llevan a sus hijos o no. De optar por continuar con las clases virtuales, los estudiantes seguirán teniendo acceso a las múltiples plataformas habilitadas para la continuidad educativa. Cuba y Venezuela están con escuelas cerradas debido al repunte de contagios. Nicaragua mantuvo sus escuelas abiertas, mientras que Costa Rica y Guatemala las reabrió parcialmente este año, en tanto que Panamá evalúa hacerlo gradualmente.