Policías que sí sirven
Mi reconocimiento para los servidores públicos que sí saben hacer su trabajo.
Hace una semana, en este mismo espacio, manifestaba mi enojo rayano en la histeria porque las “autoridades correspondientes” –como se dice en el argot político- no hacen nada contra quienes (incluidas algunas de esas propias autoridades) explotan con fines aviesos y rayanos en el asesinato a mansalva a buzos inexpertos que se ocupan de la captura del pepino del mar, benéfico mientras está en las profundidades marinas a las que limpia de putrefacciones.
Hoy no quiero tocar ese tema –ya veo que ni el mínimo caso me hacen y siguen cayendo víctimas de esa inicua actividad-, sino de la policía. Y lo hago porque quiero resaltar el espíritu de servicio y la buena educación de servidores públicos dedicados a nuestra seguridad.
La otra noche, en una calle del centro, don Juan de los Palotes (o sea yo) tomó la decisión de dar vuelta con el semáforo en rojo (desde luego previa parada para ver si no venía ni un vehículo cerca en la otra calle). Metros adelante, al tal señor de los Palotes lo detuvo un patrullero municipal, tripulante de moderno vehículo ecológico. Tras señalarle su falta y revisar que sus documentos estuvieran en orden, el amable agente le dijo a don Juan: “Tenga más cuidado y recuerde que no sólo se expone usted sino también a otras personas”. Y, ojalá que no se entere el comandante Romero, perdonó la multa.
En otra calle, no del centro, y otro día, este mismo don señor de los Palotes fue testigo de un acto de servicio que enaltece a la otra corporación: la SSP. Uno de sus patrulleros, en medio de la lluvia, bajó de su vehículo para ayudar a una mujer cuyo auto se había quedado en medio de un charco. Primero, “abanderó” la escena para proteger a la dama y luego se acercó a ofrecer apoyo. Ahí estuvo hasta que una grúa acudió al rescate de la señora.
Y ya que citamos al comandante Arturo Romero Escalante, director de la PMM, debo decir que un grupo scout recibió de parte de su jefe de paramédicos, Víctor Manuel Soberanis Cauich, un curso de primeros auxilios que fue de mucho provecho.
Esta corporación ya cumplió 14 años de fundada y va para más, eso espero.
Desde aquí se le agradece al jefe y al TUM. También, aprovechando el viaje, se felicita al comandante Martín Inurreta, nuevo director de la Academia de Policía. La institución quedó en muy buenas manos.
Más servidores públicos como ellos.