Mario Tercero
El poder de la pluma
Leo con enorme gusto que, este año, la medalla Héctor Herrera, “Cholo”, le fue otorgada a don Mario Herrera Tercero. Don Mario, uno de los artistas más gentiles, educados y talentosos que conozco, ha sido distinguido con la medalla que reconoce nuestro teatro regional. A don Mario lo he visto protagonizando obras de teatro regionales y obras clásicas. Recientemente protagonizó el cortometraje “El Tikinchick”, dirigido por el talentoso cineasta Miguel Ventura. Es un actor versátil que honestamente merece un reconocimiento mayor que el que se le ha dado en estos tiempos.
Además de un gran artista, es un asiduo espectador del teatro, siempre lo he visto en mis obras, y siempre se toma el tiempo de saludarme, por eso puedo hablar de su gentileza, porque la conozco de cerca. Si no me cree el lector, le comparto una anécdota: cuando hicimos audiciones para la película “Del manantial del corazón” publicamos una invitación a los actores. Algunos actores yucatecos no se sienten cómodos con las audiciones, incluso piensan que es una falta de respeto a su trayectoria. Pues bien, don Mario asistió a la audición, como el actor más disciplinado y comprometido.
Recuerdo que después de grabar su audición, el director me dijo: “Qué buen actor es este señor”. Le dije que era un actor importante de nuestro teatro. Por supuesto que don Mario se ganó su personaje. El día de la filmación nos dijo: “Pero yo voy con mi xun”, refiriéndose a doña Saidy Casares, su esposa, que suele acompañarlo con su mejor sonrisa. Las escenas de don Mario se grabaron sin mayor problema. No faltaban las bromas entre corte y corte, porque así es don Mario, siempre alegre y con buena disposición.
Mucho se habla de las actitudes de divos de algunos actores del teatro regional (poquitos, no todos), en el caso de don Mario no hay nada de eso. El señor hace su trabajo con el respeto que su nombre y las generaciones que le anteceden merecen. Ojalá todos podamos aprender de él, de su sencillez y su humor, de su experiencia y su disposición. Espero algún día tener el gusto de compartir escenario con él. Me encantaría escribirle una obra. Mientras tanto, le mando mis sinceras felicitaciones y le reitero un cariño y una admiración que le he manifestado desde que lo conocí. Principalmente porque es un caballero, sin faltas de respeto a nadie, sin mentadas de madre, poses de divo o ladrillos nebulosos para marearse. Eso sí, es un pícaro, un juglar, un actor, un comediante, de esos que van por la vida con el brillo en los ojos. Alabo la disposición del H. Ayuntamiento de Mérida y del alcalde por generar iniciativas que nos hagan valorar nuestra cultura y a los grandes artistas que hicieron historia, no solo en nuestro estado, sino fuera de él. “Cholo” es inolvidable, único, un hombre que sigue vivo en el corazón de muchos yucatecos, por eso es importante celebrar su vida y su obra que sigue abriendo caminos para todos.