WtE
Una planta WtE genera electricidad usando como combustible la basura.
Waste to Energy es el significado que se da a estas siglas internacionalmente usadas para denominar a una tecnología aplicada en las plantas más modernas de tratamiento y conversión de residuos en energía, y es hoy el método más avanzado, limpio y eficaz para disponer de los desperdicios, utilizándolos como combustible e incinerándolos para recuperar energía en calor y electricidad.
China posee actualmente mas de 50 plantas de este tipo en operación, Japón es el usuario más grande, con una capacidad instalada para procesar 40 millones de toneladas de desperdicios, e Indonesia ya acumula una capacidad de generación de energía eléctrica de cerca de 500 mW. En diciembre de 2016, la Ciudad de México emitió la convocatoria de la licitación para instalar ahí la que será la primera planta de termovalorización de toda Latinoamérica, que se dice será capaz de generar 965 mil mWh al año. En todo el mundo existen mil 440 plantas WtE.
El objetivo de cualquier sistema de Gestión Integral de Residuos (GIR) es reducir o eliminar los efectos perjudiciales para la salud y el medio ambiente y recuperar los recursos de este último. Se considera que la recuperación de energía es un método de tratamiento, pero también lo es de disposición final, o más bien es consecuencial de esta última.
Existen diversos métodos para recuperar recursos de la basura o, como se dice correctamente, valorizar los desperdicios, sin embargo nunca hay que perder de vista el objetivo señalado en el párrafo anterior, ya que, como apuntamos la semana pasada en este mismo espacio, a veces se cree equivocadamente que obtener ciertos productos con algo, mucho o poco, de valor a partir del tratamiento de los desperdicios es un gran negocio que paga todo el proceso que este sistema implica y hasta sobra una cantidad enorme de beneficios. Esto está muy alejado de la realidad.
Estas plantas y las empresas que las administran están por origen, vocación y enfoque destinadas a disponer de los residuos y reducirlos al máximo, no son empresas generadoras de electricidad, ya que, si ésta fuera su vocación, seguramente usarían otra tecnología mucho más barata para que vender electricidad sea un negocio. Una planta WtE genera electricidad usando como combustible la basura, porque así se deshace de ella, la desintegra literalmente y esa es su verdadera finalidad, una mínima parte de cenizas y escoria es lo que queda al final. Si se obtiene dinero al vender esa electricidad, solamente sirve para reducir el costo del proceso.
La contaminación debida a la incineración no es motivo de preocupación. En una reunión en el jardín, con unas arracheras al carbón, se emiten más dioxinas que con una planta WtE. ¿No sería fantástico que Mérida tuviera una así?