Memoria del movimiento obrero (II)
El poder de la pluma
Una muestra del universo documental sobre el Movimiento obrero-popular de 1973-1974 se refiere ineludiblemente a todo aquel escrito emanado de la praxis del movimiento y refleja su desarrollo tanto cronológico como ideológico; en los cientos y miles de volantes repartidos a lo largo de varios años, pueden conocerse las demandas iníciales, los integrantes (personas y/o agrupaciones), los planteamientos políticos que muestran la interpretación de la realidad político-económica que se tenía, las alianzas y rupturas en la lucha, el crecimiento y transformación de los reclamos que van desde una postura gremial-proletaria a una reivindicación de justicia contra el Estado después del asesinato de Efraín Calderón Lara, “Charras”, y el desarrollo de la huelga general de febrero a abril de 1974.
Aunados a los volantes, sobresalen las cartas, oficios, solicitudes, desplegados y manifiestos del movimiento que corroboran y amplían la información; estos documentos lamentablemente se encuentran dispersos, algunos pueden ser consultados en el Archivo General del Estado de Yucatán (AGEY) o en el Centro de Apoyo a la Investigación Histórica y literaria de Yucatán (CAIHLY), también en acervos particulares de participantes del movimiento o coleccionistas, pero sigue estando pendiente un trabajo sistemático de acopio, conservación y estudio. Una de las medidas a favor de su conservación ha sido la fundación en años recientes del Centro de Estudios e Investigaciones Sociales y Culturales “Efraín Calderón Lara”, con el objetivo de articular el rescate de la memoria histórica de dicho movimiento, lográndose avances y un impulso que requiere preservarse. Entre sus labores ha divulgado y digitalizado diversos documentos, aunque, como se ha dicho, el camino es aún largo e incipiente.
La importancia de estos documentos reside en primer término en ser fuentes primarias del movimiento, pero, también, en el hecho del silencio mediático sistemático impuesto por el entonces gobierno de Carlos Loret de Mola; de los periódicos de la época pocos publicaron noticias referentes a las demandas proletarias-populares y en su mayoría reprodujeron la ideología del poder, atacando y criminalizando los derechos de los trabajadores y trabajadoras, algo que se observa en otros momentos; recuérdese que en los años setenta la guerra sucia estaba en su apogeo y una de sus estrategias esenciales era la desinformación y la negación de las necesidades sociales, así como la represión, el secuestro y asesinato, además de la utilización de recursos económicos para acallar plumas y amoldar opiniones. Sobre el papel de la prensa, Pedro Echeverría ha escrito valioso folleto “El gobierno de Loret y el asesinato del ‘Charras’. ¿Cómo pudo el gobernador controlar la prensa?” (1999).
Entre las publicaciones del movimiento destaca el periódico Tribuna Obrera, órgano del Frente Sindical Independiente que circuló varios años (antes y después) reproduciendo el sentir de la lucha proletaria-popular. Otro documento que aguarda su revaloración historiográfica es la revista Por Qué?, cuyo contenido analítico e imágenes esclarecedoras han quedado para dar lugar a investigaciones que rompan el círculo interpretativo que hasta la fecha envuelve los sucesos, testimonio que no debe seguir oculto tras el “olvido” que persiste con los años como parte de la censura en torno al tema (Continuará).