Jungle Cruise, la nueva película de Disney ha llegado a carteleras, un largometraje inspirado en la atracción que se encuentra en los parques temáticos. Los nombres que resaltan en este proyecto cinematográfico son los de Jaume Collet-Serra como director y Dwayne Johson con Emily Blunt en los papeles protagónicos de la historia. 

Esta película ambientada a los principios del siglo XX, nos cuenta la historia de Frank (Dwayne Johnson) quien es un carismático capitán de una embarcación un tanto especial, la cual recorre la selva amazónica. Allí, a pesar de todos los peligros que el río Amazonas les tiene preparados, el protagonista llevará en su barco a la científica Lily Houghton (Emily Blunt) y a su hermano McGregor Houghton (Jack Whitehall). 

Al embarcarse su misión será encontrar un árbol místico que se cree podría tener poderes curativos. Está de más decir que su objetivo no será fácil, y a lo largo de su aventura se encontrarán con toda clase de dificultades, obstáculos y rivales, como una una expedición alemana que busca también este árbol con poderes especiales. 

Dwayne Johnson parece vivir en la selva, lo hemos visto ya en varios títulos (como Jumanji y Viaje al Centro de la Tierra) jugando al aventurero, una y otra vez con el mismo tipo de personaje, pues no se ven grandes cambios entre un largometraje y otro. Debo decir que tampoco recibe ayuda del guion que le proporcionaron, pues los chistes malos y rápidos de olvidar se hacen presentes a lo largo de esta propuesta. 

Por otro lado, tenemos a Emily Blunt, que si bien no podemos calificar como “mejor actuación del año”, sí se puede decir que tiene un superior desempeño que su co-estrella. 

Lo que sí vemos repetidamente, son grandes series de acción, acompañadas de efectos especiales, tantos que te hace sentir que la película se pasa volando, eso sí, haciéndonos parecer por momentos dentro de Piratas del Caribe. 

Como mencioné, las actuaciones que vemos no son muy buenas, sin embargo, la realidad es que para una película de este tipo no se necesitan grandes interpretaciones. 

La película se disfruta y hace que los espectadores puedan pasar un buen rato, escenas de acciones, buenos efectos y una secuencia de historia clásica de Disney. En definitiva debes agregarla a tu lista si quieres pasar un buen rato en familia, sin esperar grandes cosas. 

Calificación: Dos estrellas y media.