James Gunn ha regresado a la pantalla con título de “súpervillanos”, pues fue captado por DC Comics después de ser despedido por Marvel, es por eso que ahora vemos su nombre en El escuadrón suicida 2; reemplazando a David Ayer, quien fue director de la primera entrega, estrenada en el 2016. 

Puedo decir que este título fue bastante esperado por los fanáticos de los cómics, y contrario a lo que se puede pensar, esta entrega no es una continuación de la primera (o un reboot, como muchos llegaron a pensar), sino que nos cuenta una historia independiente del escuadrón. 

Este largometraje nos narra la historia de un grupo de súpervillanos, quienes se encuentran encerrados en Belle Reve, una prisión de alta seguridad y que además cuenta con la tasa de mortalidad más alta de Estados Unidos. Como es de esperarse, los villanos están decididos a salir de allí, y harán cualquier cosa para lograrlo y volver a hacer de las suyas, incluso unirse al grupo Task Force X, dedicado a llevar a cabo misiones suicidas bajo las órdenes de Amanda Waller. Completamente armados son enviados a la isla Corto Maltese, una jungla repleta de enemigos que deberán de enfrentar. 

Algo que debo de mencionar antes de cualquier otra cosa, es que el director sabe lo que hace, pues a lo largo del largometraje nos muestra una evolución muy interesante de los personajes, estos claro, se ven beneficiados por las actuaciones que observamos en la gran pantalla. En primera instancia tenemos a Margot Robbie, quien una vez más hace un muy buen trabajo de interpretación; después podemos hablar de Idris Elba, quien nos da una interesante propuesta, pues hace un buen trabajo con su personaje, al que le aporta un poco de profundidad y nos deja con ganas de más. 

Sin embargo, aunque las actuaciones son buenas, no podemos decir lo mismo del guion, pues la historia que se desarrolla a lo largo de las más de dos horas es bastante pobre, no presenta nada innovador, ni es capaz de atrapar al espectador, eso sí, llena de violencia desmedida y bastante gráfica, pero con unos efectos visuales de envidia. 

El trabajo de James Gunn sin duda merecía un guion que le hiciera justicia, sin embargo la película cumple su cometido: el de entretenernos por un par de horas. Si eres una fan de DC, seguramente ya la tendrás agregada a tu lista, si no, no hace falta que lo hagas. 

Recuerda que este título cuenta con una clasificación C, por lo que solamente podrán verla personas mayores de edad. 

Calificación: dos estrellas.