Si don Víctor viviera...
El poder de la pluma
A pesar de que ya pasaron algunos movimientos telúricos en el ámbito político, parece que las réplicas todavía se están sintiendo en Acción Nacional, donde siguen los tutis y no precisamente de jamón y queso, más bien de jalón y tieso porque ahora están los jaloneos por ver quién gana más posiciones entre los consejeros que se van a elegir este domingo 25; sin duda la puja entre el team Vila y el team Barrera es fuerte, aunque parezca que se llevan rebiemmm.
Siguiendo con el tema de la política del terruño, el día 18 se celebró el tercer lustro, para los que fueron a escuela de gobierno, los 15 años de que partiera de la escena física don Víctor Manuel Cervera Pacheco; sin duda no se podría hablar de la política en Yucatán sin mencionar el nombre de don Víctor, el único que ha sido dos veces gobernador del Estado: una de forma interina, en 1984, relevando al general Graciliano Alpuche, y la otra por elección, en 1995. Mucho se ha hablado de por qué se menciona mucho el nombre de Cervera; pueden haber muchas voces, a favor o en contra, pero bien dicen que las cosas con sustento tienen mayor relevancia, y basta recordar que en 1995 el país vivía una de las crisis económicas más fuertes, y tuvo que remar contra corriente para mantener a flote al estado, y su mente visionaria realizó estrategias que permitieron salir a flote a la economía, instalando maquiladoras y fortaleciendo el campo.
Por mencionar algunas obras que hoy siguen siendo detonantes de crecimiento: el palacio del Poder Judicial, la terminal marítima que permite la llegada de cruceros que traen divisas y poder exportar productos yucatecos por vía marítima. Iniciar su gestión con 15 planteles del Colegio de Bachilleres y terminarla con casi 80. Promover la educación en todo el Estado, creando un complejo educativo en el abandonado sur de Mérida con la Universidad Tecnológica. Faltaría espacio para hablar de las obras realizadas por Cervera.
¿Qué pasaría si don Víctor viviera, hoy que el PRI atraviesa por un panorama poco alentador? Para empezar, creo que la situación del partido sería muy diferente, porque necesita un liderazgo con firmeza, que pueda aporrear la mano y poner las piezas en su lugar. Una de las cosas que no estarían pasando si don Víctor viviera es que hubiera mucha gente desilusionada, que ya no cree en sus dizque líderes, esa gente de a pie que ha sido engañada una y otra vez. No pasaría porque si algo le dio fortaleza a don Víctor fue la credibilidad, porque para él tenía más valor la palabra empeñada que un papel firmado.
Hoy no tendría en el abandono y echados a su suerte a muchos priistas despedidos, que pasan apuros y no reciben ni una llamada de aliciente de sus líderes. Si don Víctor viviera no dejaría a la deriva a los amigos, a los priistas que han caminado poniendo el pecho y defendiendo los colores en cada elección. Si don Víctor viviera, créanme, otro sería el panorama para el partido y sus militantes, porque si algo aplicaba es aquello de lealtad con lealtad se paga.
Un recuerdo con cariño a la leyenda que camina y que tanto trabajó por y para Yucatán.