Inobjetable lo que se logró en Tizimín el pasado 6 de enero, al situarlo en el mundialmente reconocido Record Guiness, con la ROSCA DE REYES MAS GRANDE del mundo. Este logro pudo hacerse posible gracias al interés y amor que le tiene el Dr. Daniel Ávila Ruiz a Yucatán y especialmente a la tierra natal de él y mía, la ciudad oriental. Daniel Ávila Ruiz (senador en las legislaturas LXII y LXIII) es un claro ejemplo de lo que podemos lograr para servir desde nuestra posición de ciudadanos sin cargo político, como lo es él ahora.

Es una clara forma de decir sin palabras: “LLEGUÉ PARA SERVIR, SERVÍ Y COMO CIUDADANO SIN ENCOMIENDA PUBLICA, DESEO SEGUIR SIRVIENDO”. Ejemplo para mejorar nuestro entorno y saber que se pueden lograr objetivos aparentemente inalcanzables, como exponer a Tizimín a los ojos del mundo, si nos lo proponemos con persistencia y amor, aun sin apoyos gubernamentales, pero con el desinterés por obtener reconocimientos personales, ya que el Dr. Ávila Ruiz le cede todo el mérito a la Cámara de Comercio de Yucatán y particularmente a la representación de ese organismo empresarial en Tizimín.

ENTRE OTRAS COSAS. Sin salir del municipio de Tizimín, visité recientemente Popolná, la comisaría más grande de ese municipio. Este lugar, alejado de la ciudad de Tizimín y a tan solo 80 kilómetros de Cancún, cuenta con una bella laguna alimentada por varios cenotes que la mantienen viva permanentemente, motivando a los habitantes de este pintoresco lugar a convertirlo en un polo de atracción turística para quienes deseen tener una aventura en EL CORAZÓN DE LA SELVA MAYA.

El comisario ejidal de esa remota localidad, César Cauich, y los habitantes de esta comunidad están haciendo lo propio para lograr el objetivo y su esfuerzo es visible cuando se observa el muelle y el andador alrededor de la laguna con el inicio de una construcción rústica que será un restaurante.

Todo este trabajo lo han realizado los lugareños después de sus actividades de agricultura, es decir en sus horas de descanso. Espero que su esfuerzo por lograr convertir este pintoresco lugar en un excelente destino para quienes deseen tener una experiencia en el centro de la selva maya tenga el éxito merecido.

Seguiré insistiendo en la urgente necesidad de programas de orientación educativa para la población y así evitar eventos como el sucedido en días pasados. La manifestación callejera debe ser el último recurso, después de agotar todos los cauces legales, para manifestar inconformidad ante la no atención de las autoridades. Las asociaciones civiles y las cámaras deben desligarse de la tutela gubernamental para tener la autoridad moral requerida en la exigencia de sus peticiones y para el correcto desempeño de sus objetivos.