|
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram

“ No te estoy preguntando nombre ni profesión, cuántos títulos académicos tienes. Tampoco te pregunto a cerca de tu clase social, sobre el dinero que tienes, ni posesiones y ni siquiera si eres una persona buena o no, flaca o gorda, alta o baja”. 

¿Quién eres? 

“La mejor manera de reconocernos es a través de todo lo que no somos, de igual manera que no podría reconocer mi rostro si no es a través de un espejo que me lo muestre”. 

Todo lo anterior encomillado, es el contenido del envío de un amigo. No sé si es original de él o lo transcribió, pero me pareció un tema interesante a reflexionar y pensar realmente que quizá nos estamos perdiendo de la aventura más importante en esta experiencia de vida. Conocernos. O al menos aproximarnos un poco a quienes realmente somos. 

A pesar de nuestra naturaleza dinámica y en constante movimiento. Conocer el campo mental en el que estamos, nuestra identidad microscópica identificada con el macro universo, nuestro biorritmo dentro del ritmo universal, para identificarnos con nuestro YO interno, y con esa acción generar un efecto, creativo efecto de esa causa. 

Parece un poco complicado, pero conforme vamos avanzando en esta loca intención se van recorriendo velos que nos permiten, no ver, pero sí percibir que hay algo maravilloso mas allá de lo físico. 

La METAFÍSICA nos abre un poco la mente hacia esas que han de ser maravillosas regiones en donde no hay más límite que nuestra capacidad de imaginar. Y por lo menos en esos momentos somos habitantes de lugares maravillosos y protagonistas de aventuras sensacionales. He leído en algún lado: “SI LO PUEDES IMAGINAR, LO PUEDES LOGRAR”. Quizá a esta máxima se aferraron Leonardo, Miguel Ángel, Cristóbal Colón y otros adelantados. 

Cuando se rebasa la mayorías de edad, digamos los 60 años, es imperioso pensar en que existe algo más que esto que ya empieza a terminar, para no aferrarnos en forma enfermiza a lo imposible y abrirnos a lo posible, que es trascender con toda nuestra capacidad intelectual y emocional para empezar a vivir el prólogo, digamos en forma literaria, el libro de una nueva aventura de vida, de la que no sabemos a ciencia cierta nada pero podemos imaginarlo todo.

Que maravilloso si pudiéramos plenamente aceptar que somos creadores o co-creadores de nuestra existencia y conociendo las reglas del juego, “EL MANUAL DEL FABRICANTE” andar generando ambientes de bienestar para todo nuestro entorno y disfrutando la paz que ha de producir esta conducta……QUE BELLO SERÍA….

Lo más leído

skeleton





skeleton