Más americanismos derivados del maya
El poder de la pluma
Además de los 14 mayismos relativos a vegetales, el Diccionario de Americanismos de la Asociación de Academias de la Lengua Española (Asale) incorpora otras 36 voces de origen maya, aún vigentes en el habla coloquial de los habitantes de la península yucateca y del sureste del país. Las entradas incluyen su etimología, aunque las definiciones (tal y como se las presento) son precisas y breves, característico de los diccionarios generalistas. Cabe mencionar que este Diccionario es descriptivo, carece de propósito normativo y no da pautas para “el bien hablar o escribir”.
Ocho voces se refieren a la gastronomía regional; y se fueron incorporando a lo largo de los más de 100 años de existencia de la Asale: Mucbilpollo (de mukbil, enterrado), alimento elaborado con carne de pollo y cerdo sazonada con especias, hortalizas y jugo de naranja, cubierta con masa de maíz y hojas de plátano y asada al horno; como sinónimo aparece la voz pibilpollo (píibil, cocido bajo tierra), más empleada en el estado de Campeche. Kol (k’óol), caldo que se obtiene del cocido de carne de pavo, al que se le agrega manteca de cerdo y harina. Kodzito (koots’, enrollado), tortilla de maíz con un alimento enrollado en ella. Pibinal (píibil, asado bajo tierra), elote asado. Chocolomo (chokoh, caliente), guiso de carne de res con tomate. Kabic (k’abik), erradamente dice que es un “guiso hecho con carne salada y chaya”; el Diccionario Maya Popular lo define como “Guisado preparado con un poco de chile y masa coloreada con achiote desleída en el caldo”.
Solo contiene cuatro nombres de animales: Jaleb (jaaleb), tepezcuintle (Dasyprocta punctata). Tucho/a (xtuch), mono, mico. Sacuchero (sak’uch), insecto coleóptero de hasta 2 cm de longitud y cuerpo aplanado dorsalmente, de color verde oscuro atornasolado (Cetonia aurata). También aparece la palabra Yuya, aunque no incluye su etimología y lo define como “Zanate hembra”.
Del mismo modo figuran dos tipos de tierra: Sascab (saskab), tierra blanca de origen calizo que se emplea en construcción; y derivado de este vocablo aparece sascabera: cantera de la que se extrae el sascab. Kancab (k’áankab), que se define imprecisamente como “Barro lodoso y pegajoso que suele darse abundantemente en las tierras calcáreas yucatecas”, y no “tierra rojiza” como se le conoce. Curiosamente sale xaybé (xa’ay beh), camino que se bifurca; aunque indica que es usado en el medio rural.
Figuran sustantivos diversos usados en el ambiente rural: Xix (xiix), residuo o sedimento líquido, especialmente de la bebida del pozol; de donde deriva la locución adverbial “hasta el xix”, totalmente, íntegramente. Sosquil (súus-kij), fibra vegetal de henequén que se emplea para hacer estropajos. Tup (t’uup, dedo meñique), hijo/a menor (popular). Chichí (chiich), abuela; y como segunda acepción aparece “Nodriza, mujer”.
Finalmente aparece una voz híbrida, que ha caído en desuso: Mayocol (de mayor y kool, milpa), capataz, mayoral de una finca; que se usaba en las haciendas henequeneras.