Indudablemente han sido los antropólogos, nacionales y extranjeros, quienes desde mediados del siglo pasado nos han proveído información visual de gran valor históricocultural de individuos y grupos mayas contextualizados en su entorno. En la península yucateca, los antropólogos Robert Redfield, Alfonso Villa Rojas y Richard A. Thompson, entre otros, nos presentan en sus obras imágenes del hábitat, objetos y costumbres de diversos grupos mayas peninsulares.

Dos fotógrafos-etnógrafos, referentes para la historia de los mayas yucatecos contemporáneos, son Macduff Everton (EU, 1947) y Christian H. Rasmussen (Dinamarca, 1943), quienes poseen mucho en común: pasaron largas temporadas de campo conviviendo con familias mayas del oriente del estado; capturan imágenes de la vida cotidiana; narran iluminadoras historias de mujeres y artesanos mayas, jmenes, milperos, henequeneros, chicleros. He tenido el honor de presentar obras de ambos autores.

Macduff es reconocido en muchos países del mundo, trabajó para la National Geographic, la revista Life, LA Times, NY Times y el Smithsonian Magazine; fotografió antiguas ciudades mayas que estaban siendo restauradas por talentosos estudiosos y epigrafistas: Linda Schele, Justin Kerr y Peter Matthews, entre otros. Documentó cuidadosamente durante cuatro décadas -teniendo él apenas 20 años- distintos aspectos de la vida íntima de los mayas del oriente yucateco. En su libro Los mayas contemporáneos: Incidencias de un viaje y amistad en Yucatán, publicado en español en 2016, armoniza elegantemente fotografías en blanco y negro con conmovedoras narraciones. Si bien el libro cuenta las historias de algunas familias, en realidad refleja el devenir y los procesos de transformación, adaptación, y resiliencia de los pobladores, alma de la cultura maya. En su temporada con los chicleros, deja ver en su fotografía la dureza física de la vida en la húmeda y claustrofóbica selva infestada con insectos venenosos y serpientes. Macduff se centra en el sentido del lugar, ya sean retratos de individuos o retratos de un paisaje, y captura momentos emotivos y elocuentes. Muchas veces le pidieron fotografiar al difunto porque la gente no tenía ninguna foto de él, o celebraciones como bodas y otros eventos sociales.

Christian Rasmussen es otro de los artistas de la lente más reconocidos que ha retratado a los mayas peninsulares desde hace más de cuatro décadas. Su vasto acervo fotográfico es un referente para la historia de los mayas, pues además de su valor artístico posee un valor cultural extraordinario: fiestas patronales, ceremonias religiosas y mortuorias, ritos de paso, rituales agrícolas, la actividad artesanal y especialmente la actividad milpera, son algunos de los temas que ha tratado en más de una docena de libros que ha publicado con su compañera, la antropóloga Silvia Terán.

Christian ha cautivado por las historias de sus retratos, los cuales han servido para ilustrar numerosos textos de antropólogos e historiadores. La base de su trabajo está en el atrevimiento al retratar paisajes y gente con gran ingenio, logrando composiciones auténticas con originales resultados. Su obra ha sido exhibida en varias exposiciones fotográficas en México y el extranjero.