Para Huberto Batis, siempre
franco e incendiario…

Pocas son las oportunidades que tenemos en el estado de escuchar música hecha en Yucatán, sobre todo cuando no se ajusta a los paleolíticos géneros de la trova, el bolero y la jarana, que algunos usamos como somnífero cuando el descanso se nos escapa. Por ello, es de resaltar que el Festival de Jóvenes Creadores, que hoy termina, haya organizado durante toda la semana una muestra de música alternativa y expresiones urbanas en uno de los máximos recintos culturales de la ciudad: el Teatro Mérida (ojalá pronto retome ese nombre, pues eso de llamarlo Armando Manzanero fue una prebenda política de un casquivano gobierno del cual no quiero ni acordarme).

Se ha presentado la coyuntura de que al fin la nueva música yucateca sea reconocida protagonizando el Festival de Música Canicular 2018, hoy sábado a partir de las 6 p.m., en el recién remodelado edificio estilo art deco que se encuentra sobre la calle 62, al paso de propios y extraños. Y para que no haya excusa, todos son bienvenidos para escuchar una selección variada de algunos de sus máximos exponentes, ya que la entrada es libre.

Las bandas invitadas son: El Ensamble del Refugio, Los Mayucas y La Polilla Blues Band, quienes tocarán por alrededor de 80 minutos cada una y se irán alternando a lo largo del día, con descansos de 10 minutos entre grupo y grupo, con el objetivo de tener un panorama de la música contemporánea que se hace en nuestro estado, de la mano de tres agrupaciones que, pese a su juventud, son bastante experimentadas en las lides sobre el escenario.

La magnífica idea es un festival que tendrá una duración de 4 horas en donde el público asistente podrá conocer y escuchar una muestra diversa de música original yucateca de diversos géneros, como ritmos latinos, funk, hip hop, blues y rock, así como fusiones de géneros variados en un show musical basado en la interacción entre los ejecutantes y el público, quienes podrán presenciar tres conciertos en vivo durante una sola tarde calurosa, una excelente forma de celebrar la música al abrigo de la canícula meridana.

Si usted es partidario de los espectáculos en directo y considera que la cultura es algo vivo y en constante evolución -que no precisa de rescates ni imposiciones institucionales-, ¡ahí nos vemos…!