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El inicio del 2024 me parece un buen momento para recordar la importancia de atender nuestra salud mental y para ello traigo la obra de la escritora española Rosa Montero, “El peligro de estar cuerda” (2022), en un primer momento la había abordado enfocándome en la relación que existe entre la creatividad y la locura, pero en esta ocasión me inclino por escribir la otra vertiente del libro: las enfermedades psíquicas y cómo éstas son proclives en los artistas, léase plásticos, literatos, actores, escritores, etc.

La realidad es que todos y todas estamos al hilo de padecer algún trastorno mental, el mundo agitado y violento en el que vivimos, donde la exigencia cada día es más, nos va desconectando del mundo interior para estar permanentemente conectados al mundo exterior, cumpliendo ciertas expectativas, o cubriendo un horario laboral infernal para recibir un salario irrisorio, que aunque habitemos una de las mejores ciudades del país, no deja de ser una de las más caras con trabajos mal pagados, y por supuesto que también la economía nos afecta la salud mental.

También encontramos infinidad de adultos negando su condición mental, minimizando la importancia de su autocuidado y, mientras tanto, sin hacer consciencia de sus padecimientos, van por el mundo destruyendo a gente inocente, pero el ojo de la mente permite ver el abuso y la perversión, tal como diría Carl Gustav Jung: “las personas podrían aprender de sus errores sino estuvieran tan ocupadas negándolos”.

Si bien hay una predisposición del cableado cerebral -parafraseando a Rosa Montero- también somos influidos por el entorno, nuestras vivencias de la infancia, las relaciones con nuestros pares, sucesos sociales, nos han condicionado para ser y actuar de cierta manera, pero eso no justifica nuestras acciones del presente, siempre podemos mejorar si decidimos trabajar en nuestra salud mental, mejorando nuestras percepciones y ampliando nuestra consciencia.

De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS) una de cada cuatro personas sufre de algún trastorno mental en cierto momento de la vida, las alzas en el padecimiento de la ansiedad y depresión se multiplican vertiginosamente, así como las incidencias de suicidios que indican un deterioro en la salud mental. Tema urgente a atender por políticas de salud públicas, donde la atención psicológica sea una prioridad y un derecho humano universal.

Retomando la obra en tema, Montero señala cómo el dolor o el trauma lo primero que te arrebata es la palabra, y sin ella sobreviene la incomprensión del suceso, el cableado cerebral procesará el evento traumático con los recursos que cuente y justamente ahí intervenimos los y las terapeutas, para acompañar con las palabras indicadas, porque como dice Michèle Petit la palabra siempre ayuda, ya sean escuchadas, leídas, escritas, habladas; nunca tragadas o silenciadas.

El cuerpo humano tiene la capacidad de procesar el dolor o el trauma, la mente para resignificar el evento, recordemos que cuando la boca calla el cuerpo habla, no permitamos el silencio, el olvido, la desconexión; priorizar la salud mental es velar por el equilibrio y la armonía de nuestro ser.

Para consultas de psicoterapia pueden contactarme por mensaje al celular 9992420408 o al correo electrónico [email protected].

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