Esta semana se estrenó en las salas de cine la película francesa “Mientras esté vivo”. Fue dirigida por Emanuelle Brecot, quien también estuvo a cargo del guion, junto con Marcia Romano. El elenco de esta historia está conformado por Catherine Deneuve, Benoît Magimel y Cécile de France.

Destaco que esta película se estrenó hace ya unos meses en cines de otras partes del mundo.

Este largometraje nos cuenta la historia de un hombre condenado a morir demasiado joven por una grave enfermedad. A medida que su padecimiento avanza, seremos testigos del sufrimiento de su madre ante lo inaceptable. Además de la tremenda dedicación de un médico y una enfermera para acompañarlos en este camino imposible, guiándolos hacia la aceptación. Un año, cuatro estaciones, para sobrellevar la enfermedad, domesticarla, tiempo para entender lo que significa morir mientras se está con vida.

Sigue la secuencia de las cuatro estaciones del año y en cada una se muestra cómo se puede vivir mientras la vida se acaba.

Lo que más distingue a este largometraje es la música y la fotografía que nos presentan, pues acompañan a la perfección a la historia que se nos va narrando, llenando el ambiente de melancolía y tristeza. Algo que debo aclarar, es que la directora no recurre en ningún momento al sentimentalismo para provocar llantos o lástima, por y para el personaje principal. Es profundo, pero realista, lo que permite que nosotros como espectadores, siempre podamos seguir la historia sin perderle el hilo por estar distraídos con otras cosas.

El guion es bueno, la historia logra entrar en lo más profundo de los sentimientos del espectador, claro que esto también se le debe agradecer a las actuaciones que nos ofrece el reparto, pues todos hacen un trabajo extraordinario. Las interpretaciones logran captar la atención de todos, esto también brinda un punto a favor.

Esta película es parte del Tour de Cine Francés y se proyectó en Cannes. Es un filme que definitivamente vale la pena agregar a nuestra lista de títulos por ver, pues disfrutaremos de un gran espectáculo visual. “Mientras esté vivo”, es una de esas historias que se quedan con nosotros por mucho tiempo y a las que seguramente retornaremos en algún punto, listos para llorar de nuevo. Sin duda, una de las mejores películas francesas que he disfrutado durante estos últimos meses.