|
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram

En esta tierra, en la que meditar debe ser lo permanente. Donde el pasado cercano de la estirpe maya se confunde con el futuro lejano de someter esta tierra.

Tierra incomparable en su esencia, tierra confundida en su tiempo. Nacencia que añora un futuro. Estática, triste, soñando en el pasado, su pasado vibrante de elevadas emociones… hoy confundida vibra con pueril apariencia.

Península invadida por la codicia de voraces empresarios. Península que no puede defenderse, pues su mente está llena de galácticos cálculos. No se perturba en su esencia por el presente que pretende romper la cadencia, interrumpir el biorritmo del suave desarrollo espiritual que tiene su centro en la Península, altar del supremo.

El pueblo aturdido con estridente aquelarre. Este pueblo que recibe con los brazos abiertos. Yucatán, tierra dividida por ideas políticas. Un hermoso Campeche que no supimos defender, y Quintana Roo, paraíso convertido en zona de desahogo, para excesos de personas que en su país guardan otra apariencia.

Yucatán dormido en camas que destruyen su espalda. Yucatán que cuando hablaba de apertura al progreso, no se refería a marcas de automóviles que se llevan el capital a otros países, dejando migajas.

Las ciudades siguen creciendo con personas venidas de todos lados, subyugados por la magia de esta Península, distinguida por el Creador. Que no debe ser molestada al extremo, que abusan de su bondad y la contaminan, como si fuera su patio trasero, sin resarcir el daño que causan, como si fuera una colonia que debe ser explotada por sus conquistadores.

No insistan, porque la Península tiene vida y un día puede sacudirse la perversión y oropeles, cubriendo con su mar salado, mar de lágrimas, de vergüenza y pena, arrasando todo y regresar a de donde vino otrora, llena de entusiasmo e ilusiones que supimos aplastar.

ENTRE OTRAS COSAS: promete nuestro Gobernador electo rescatar la esencia de nuestra Península y le creo, porque su origen, como el de todos los yucatecos que amamos nuestra Península, ha sido afrentado por la confusión entre satisfacción y explotación. Un hombre que conoce al pueblo, sabe lo que necesita el pueblo.

Lo más leído

skeleton





skeleton