Héroe o villano: Luigi Mangione
Enrique Vera: Héroe o villano: Luigi Mangione.
"A los federales, seré breve, porque realmente respeto lo que hacen por nuestro país. Para ahorrarles una extensa investigación, declaro abiertamente que no estaba trabajando con nadie. Esto fue bastante trivial: algo de ingeniería social elemental, CAD básico y mucha paciencia. El cuaderno de espiral, si está presente, contiene algunas notas sueltas y listas de tareas pendientes que ilustran la esencia del asunto.
Mi tecnología está bastante bloqueada porque trabajo en el ámbito de la ingeniería, así que probablemente no haya mucha información allí. Pido disculpas por cualquier conflicto emocional generado, pero tenía que hacerse. Francamente, estos parásitos simplemente se lo merecían”.
A primera hora del miércoles cuatro de diciembre, Brian Thompson, CEO de UnitedHealthCare, la aseguradora más grande de Estados Unidos, camina por la sexta avenida de Manhattan.
A pocos metros del lujoso hotel Hilton, Thompson, cae abatido; ha recibido un disparo por la espalda desde una pistola con silenciador; dos tiros más le rematan en el suelo. Un sujeto encapuchado huye de la escena en bicicleta. El ataque es premeditado y selectivo. Las autoridades distribuyen las imágenes del delito. Se busca al sospechoso.
Un paradójico descuido. El perpetrador es identificado por las cámaras de un hostal al retirarse la bufanda que le cubría el rostro. Todo por coquetearle a la recepcionista. Será capturado días después en un McDonald’s en Altoona, Pensilvania. This is United States, anyway. Ha nacido una nuestra estrella, un nuevo antihéroe y se llama Luigi Mangione.
El asesinato de Brian Thompson a manos de Luigi Mangione ha generado uno de los fenómenos más complejos de las últimas décadas en la opinión pública estadounidense y pone de relieve uno de los principales problemas estructurales del país anglosajón: el sistema de salud.
Mangione ha desatado en las calles, pero sobre todo en las redes sociales, una ola de apoyo y solidaridad sin precedentes reivindicando su crimen. ¿Cómo es posible que buena parte de la opinión pública reivindique un asesinato? Una lectura fácil y superficial del ascenso a la fama de Luigi Mangione se explicaría por el atractivo físico del personaje en combinación el fetichismo netflixiano por las personas que cometen un crimen (sobre todo si son guapos, guapas, guapes).
Pero por debajo de esa lectura superficial hay una corriente más de fondo, un malestar acumulado de muchas décadas. Estados Unidos tiene el sistema de salud más caro del mundo y ocupa el lugar 42 en esperanza de vida.
Un ciudadano estadounidense puede quedarse en la calle si llega requerir de una cirugía y puede literalmente morir si no cuenta con un seguro privado. El sistema de salud en Estados Unidos no es sostenible porque no está diseñado para garantizar la salud de su población sino para generar enormes ganancias a unos particulares.
El asesinato de Manhattan ha servido para que muchas personas expresaran su frustración sobre cómo funciona el sistema y muchas personas intentarán resolver otros problemas de fondo con sus propias manos. Esto representa un serio problema en un país hecho un polvorín como Estados Unidos.
En México, la precarización del sistema de salud también se explica, por ejemplo, por un consorcio de farmacias particulares con paupérrimas condiciones laborales que usa como imagen botargas y peluches muy distinguibles. Seguro adivinan.