De elecciones y voluntades
Héctor López Ceballos: De elecciones y voluntades.
Insiste el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, en reformar al Poder Judicial Federal, sobre todo después del revés a su “Plan B” en materia electoral. En paralelo, la andanada de ataques e improperios en contra de uno de los Poderes de la Unión continúa diariamente en las mañaneras.
Promete AMLO que para enero de 2024, el último año que estará en la Presidencia, enviará al Congreso de la Unión una iniciativa de Reforma Constitucional a fin de que los jueces, magistrados y Ministros de la Corte sean electos por votación directa. Es decir, López Obrador propone que quienes toman las decisiones en el Poder Judicial se conviertan en actores políticos y hagan campaña para “ganar” un espacio en la judicatura. Ya un senador oficialista -Armenta Mier- había enviado una iniciativa al Senado de la República para que “la elección del Poder Judicial sea directa”. Va más allá incluso que AMLO -ya sea por temeridad o ignorancia-, pues la redacción de la iniciativa implicaría que todo el Poder Judicial (no sólo jueces y magistrados) sea electo por votación directa. Comentaba el suscrito a modo de broma, que las campañas versarán sobre quién notifica en menos tiempo o quién cose mejor un expediente. La increíble laxitud con la que estos legisladores legislan, como si de hacer enchiladas se tratase, podría impactar grandemente en uno de los pilares de la República.
No, estimado lector. Los jueces, magistrados y ministros no deben ser elegidos por voto directo. Por más “democrática” y utópica que suene la retórica obradorista, elegir estos puestos como si fueran diputados es una pésima idea. Implicaría, para empezar, que los jueces sean antes políticos que juristas (entorpeciendo el trabajo judicial), y abriría la posibilidad a que cualquiera pueda ser juzgador. Y no, tampoco está mal que no cualquiera pueda ser juzgador. ¿Se imagina usted que todos votásemos por el médico que va a realizarle una cirugía? ¿Por qué no hacer elecciones para designar al Secretario de Salud o de Seguridad? Hay cargos públicos que requieren una especialización y experiencia específicas, dada la naturaleza y responsabilidad que implica el trabajo a desempeñar. Guste o no el papel de los jueces, son personas a las que se les suele exigir una preparación suficiente para decidir sobre el presente y futuro de las personas. Para ser Juzgador no basta el 90% de honestidad y el 10% de capacidad que cierto Presidente presume en su Gobierno.
Al Presidente no le molesta la “falta de democracia” en el Poder Judicial. Le molesta, en realidad, que exista un freno a la constante inconstitucionalidad de los actos del oficialismo. Molesta que el cuatroteísmo no pueda hacer y deshacer como quisiera. Molesta la Constitución. Molesta que, a pesar de la popularidad que se ha vuelto logro supremo del Gobierno, no tengan la mayoría legislativa que se requiere para cambiar la Carta Fundamental. Se quejan de que la Corte va en contra de la voluntad popular, pero ignoran a propósito y conveniencia la voluntad del pueblo que decidió no darles la mayoría que se requiere para cambiar la Constitución.