Valoremos la labor que desempeñan las y los docentes
Hortensia Rivera Baños: Valoremos la labor que desempeñan las y los docentes.
Más allá de que un 15 de mayo de 1917, Venustiano Carranza designara honrar a los docentes, y desde esa fecha los celebramos por decreto, ¿quién no recuerda de manera especial a algún profesor? Uno siempre va a tener presente a aquel docente que le inspiró y lo motivó a salir adelante.
Es así, como enfatizamos la importancia de los docentes en la vida de nuestros niños y niñas. Reconocemos su labor y su empeño en la trasmisión del conocimiento; todavía resuenan las palabras de una gran maestra, María Montessori, quien dedicó sus esfuerzos y buscó estrategias para ayudar a los docentes en su tarea de enseñar: “El secreto para ser buen maestro, es ver la inteligencia del niño, como un campo fértil en que se pueden sembrar semillas para crear el calor de la ardiente imaginación, eso es lo que hace que florezca ese campo fértil que es la inteligencia de los niños”.
Sin embargo, ser maestro no es una labor fácil, esta profesión es un eslabón fundamental en la sociedad y demanda diariamente cargas de trabajo que no sólo se miran en un aula de clases. Los profesores planean sus clases desde casa, constantemente necesitan actualizarse para no quedar rezagados con los nuevos modelos educativos. Estar frente a grupo ya sean niños, adolescentes, universitarios, el conocimiento que el maestro transmite es pieza clave para el desarrollo integral, su crecimiento físico, social y cognitivo del alumno. Los maestros llevan a cuestas la labor de dar, como bien dice la escritora Elena Poniatowska: “Los profesores se desprenden de cuanto tienen y de cuanto saben, porque su misión es esa, dar”.
En México, la docencia implica muchos retos, las cargas de trabajo que el profesor enfrenta no son acordes al salario que percibe. Los maestros en México son poco valorados y el apoyo que se les da es mínimo, y siempre está cargado de obstáculos que el docente debe resolver, se necesita tener un alto sentido de vocación y el gusto por la enseñanza debe ser muy fuerte.
Un maestro necesita mejores condiciones de trabajo y un salario digno, ¿y qué me dicen de los maestros rurales? Se sabe que los maestros rurales perciben un sueldo inferior a un maestro que trabaja en la urbe. Pero los obstáculos que enfrenta un maestro rural son mayúsculos. Un ejemplo de esto, en Chiapas, los maestros llegan a comunidades tan alejadas que la lengua originaria de la región no es el español, debido a eso, el docente primero tiene que aprender la lengua nativa y después iniciar el programa del ciclo escolar, y esto no es reconocido, de hecho, la plaza tiene las mismas características, los mismos derechos, las mismas obligaciones, pero el salario es inferior.
Las y los docentes son piezas claves en el sistema educativo del país, son la guía para la construcción del conocimiento, valoremos su esfuerzo y dedicación.