Propuesta pedagógica: las sociedades escolares humanitarias (I)

José Ramón Pérez Herrera: Propuesta pedagógica: las sociedades escolares humanitarias (I).

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A Gaby en su cumpleaños

El pedagogo cubano-yucateco Rodolfo Menéndez de la Peña sostuvo una visión educativa orientada en crear y reforzar un ideal moral en los niños y los jóvenes yucatecos de finales del siglo XIX y principios del XX. En este tenor, concibió la educación como el instrumento con el que los niños y los jóvenes podían interiorizar valores que favorecieran un mayor grado de orden, progreso y civilización.

Con ese objetivo propuso la creación y la fundación de Sociedades Escolares Humanitarias y de Protección a los Animales en las escuelas públicas y privadas del estado, con lo que pretendía promover valores como: la solidaridad, la cooperación, la compasión, el respeto, el trabajo, la bondad, la honradez y la caridad, entre muchos otros valores deseables de la sociedad yucateca de la época.

Rodolfo Menéndez de la Peña planteó las sociedades escolares como fuentes de las que emanarían ideales en las que se fomentarían prácticas humanitarias y moralizadoras en los niños y jóvenes para formarlos como ciudadanos virtuosos y ejemplares que el país necesitaba para su sano desarrollo y progreso. Este tipo de organizaciones escolares eran promovidas en otros países de Europa, América y también en Estados Unidos.

En el periódico escolar, La Escuela Primaria, en su edición del 15 de agosto de 1902, don Rodolfo Menéndez de la Peña apuntó que “estas sociedades tienen por objeto fomentar entre los niños el respeto á la ancianidad, la compasión á todo ser débil, el compañerismo entre los estudiantes, etc. La protección de animales y plantas y de obras de arte entra muy especialmente en el propósito de las sociedades escolares humanitarias”.

Uno de los pilares fundamentales de las sociedades escolares humanitarias era la protección y el cuidado de los animales domésticos. Rodolfo Menéndez propuso que en las escuelas rurales se crearan sociedades protectoras de árboles y pájaros, pues consideraba que los espacios escolares eran propicios para promover valores que formen un espíritu humanista en los niños. Por lo que impulsó la fundación de las sociedades escolares como componentes fundamentales en la educación de los niños y jóvenes yucatecos.

Las sociedades escolares, en esencia, promovían el cuidado, la protección y el respeto hacia los animales y todos los seres vivos. Su preocupación era despertar en los niños y los jóvenes la sensibilidad hacia el maltrato que sufrían los animales. En agosto de 1901, en La Escuela Primaria, enfatizó a los niños que “maltratar á los animales es una crueldad, puesto que se les hace sufrir inútilmente; es una injusticia […], es una ingratitud, pues los animales domésticos nos son útiles de diferentes maneras y estamos obligados á ser buenos con ellos”.

En el ideario pedagógico de Menéndez de la Peña, estas sociedades cumplían con el objetivo de educar y enseñar a los niños el cuidado y la protección de los animales. (Continuará).

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