Mala impresión en… 3, 2, 1
Juan Manuel González Ponce: Mala impresión en… 3, 2, 1.
Con la velocidad a la que corre la comunicación, dejar una mala impresión puede multiplicarse y causar una catástrofe de la que no puedas salir jamás. El cuidado que uno debe tener para manejar su vida pública y privada tiene que ser excelso, pues un descuido o un segundo de debilidad, puede ocasionarte el fin de tu carrera. Lo adicional a esto, que hace que se pueda multiplicar el daño causado, es que con el poder que adquirieron los medios de comunicación y redes sociales, una calumnia se puede convertir en una verdad, mientras no se pruebe lo contrario. Alguien puede inventar cosas de ti y los demás reaccionarán en automático y en segundos verás cómo gente que ni te conoce, ya te odia con pasión.
Aquí te menciono 5 acciones que te pueden hundir causando una pésima impresión:
1. La mala apariencia: aunque la apariencia no lo es todo, es una parte importante para comunicar nuestra personalidad, sobre todo en un acto de imagen cuando queremos entrevistarnos por un puesto o una propuesta laboral. Tener una buena apariencia no cuesta mucho, sólo es cuestión de tu naturaleza y de tu esencia.
2. La calidad de tu trabajo: la gente que labora o ha laborado contigo, tus clientes o proveedores, saben cómo trabajas y lo profesional que eres o no. Las personas que nunca lo han hecho, pueden sumarse a la ola, pero jamás sustituirán a los que, sí tuvieron contacto directo y tienen toda aceptación de sus palabras, desgraciadamente, aunque sea mentira.
3. La transmisión de tu energía: sí existen las personas que emanan una energía terrible al entrar a algún lugar o al hablar en público por la forma en la que se expresan o tratan a las demás personas. Pero lo que normalmente conocemos como esas personas que son de “sangre pesada”, son justamente esas que transmiten mala vibra o energía.
4. Ser mal receptor: esas personas que cuando les estás hablando, están usando su celular y jamás te miran a los ojos, merecen el infierno absoluto, no sólo por ignorarte, sino por la importancia que les das al compartirles algo y a ellos parece no interesarle en lo absoluto lo que tienes que decirles. Además de ser de pésima educación, terminas ocasionando que la gente te aborrezca.
5. Tu trato a la gente: el símbolo de una impresión negativa es tu trato hacia las demás personas. Hay gente que se da el “lujo” de tratar mal a los demás como si fueran estrellas de cine y con trabajo tienen a alguien que los soporte.
Una mala impresión es tu peor enemiga.