Si me afecta… pierdo
Juan Manuel González Ponce: Si me afecta… pierdo.
En la vida nos van sucediendo cosas a través del tiempo, y en ocasiones algunas nos afectan más que otras. La realidad es que mientras más apegados estemos a lo que nos sucede de manera negativa, más va a influir en el impacto de nuestras emociones. Por esta razón es que debemos procurar que las cosas nos impacten de la menor y mejor manera. Mientras más te afecte algo, más saldrás perjudicado con tus actividades normales de cada día. Todo esto puede causarte distracción, depresión o alguna forma de deterioro físico o mental. No debemos, ni deberíamos permitir que esto nos coma por dentro.
Aquí te comento 5 formas de evitar que las cosas nos afecten de mala manera:
1. Practica meditación: la meditación es una práctica que nos ayuda a manejar nuestros sentimientos e impulsos. No es cuestión de hacerlo una vez, sino de entrenar lo más que se pueda, para así poder lograrlo. Hay ocasiones que no podemos evitar que nos duelan, pero si podemos evitar sufrirlas.
2. Analiza tus sentimientos: una vez sucedido lo que te empiece a afectar, toma tu distancia para que analices tus sentimientos de la mejor y más fría manera que se pueda. Lo ideal es que una vez analizados, puedas dirigirlos y controlarlos para evitar te dañen de otras maneras.
3. Enfócate en lo que puede controlar: si empezaremos analizando los sentimientos y luego dividiéramos las cosas que podemos controlar y las que no, resolveríamos y evitaríamos salir dañados de este tipo de sucesos. Elimina de tu sistema lo que no puedes controlar para que te enfoques en lo que sí. Cuando tu enfoque es lo que no depende de ti, produces mucha ansiedad y falta de control, que pudieran convertirse en depresión.
4. Aprende de lo sucedido: nunca debes tomar las cosas como malas o perdidas, sino de lo sucedido que puedes aprender y sacarle provecho. Es probable que cuando te des cuenta de la lección que te deja lo acontecido, te afecte mucho menos, porque para la próxima ocasión, si es que la hay, serás más fuerte y tendrás más experiencia.
5. Acude a terapia: si el sentimiento es muy fuerte y no puedes controlarlo, acude a terapia, no tiene nada malo y te puede dejar mucho de bueno. En ocasiones la carga emocional es muy fuerte y puede llegar a consumirnos si no la atendemos a tiempo. Déjate llevar y que te conduzcan la parte que te cuesta trabajo.
Tomemos en cuenta estos datos para poder enfrentar nuestra carga emocional y sentimientos cuando nos topemos con situaciones difíciles de manejar.