De la tierra del Mayab profundo salen voces que nos hablan
Raúl Gasque: De la tierra del Mayab profundo salen voces que nos hablan.
Inicio con una afirmación: Yucatán no es Mérida, y Mérida no es Yucatán. La motivación de esta aseveración redundante reside en el arte y la cultura. Puedo afirmar que la mayoría de la gente, incluyéndome, podría creer que lo que sucede en la capital yucateca es el reflejo de lo que acontece en todo el Estado. Y nada más lejano que aquello.
Mérida es una ciudad con una tendencia de ritmo colonial y ladina. Muchos de los otros municipios tienen un marcado tono Maya Peninsular. Esto quiere decir que lo que se produce culturalmente es pronunciadamente diferente. Un ejemplo es el trabajo y taller del artista contemporáneo José Chi Dzul.
José, a través de su taller KO’OX Túukul KO’OX BOOM, realiza obras que se vuelven posicionamientos. El motivo primero es volver la palabra maya —que se gesta en su razonamiento— un posicionamiento universal. La obra de José busca un desprendimiento de lo colonial. Trabaja con pigmentos naturales que rodean el taller que fundó. Motiva que la palabra brote como un río, envía propuestas de exposición a todo el mundo —literal—, y pone al municipio de Dzán, Yucatán, en el mapa de lo que sucede en materia de arte contemporáneo en la entidad. Con una marcada diferencia de lo que normalmente se mira en Mérida: José pone la Maya en el contenido/ técnico al frente y al final.
Al llegar a Dzán uno mira un poblado tranquilo pacífico. Un paisaje marcado por árboles de cítricos y el olor a estos mismos. Las casas son un combinado de moradas mayas con otras con una tendencia moderna. Lo cual es resultado de la migración de un gran número de los habitantes naturales de la región. A la entrada de Dzán uno puede ver una vereda bellísima de flamboyanes, rodeados de cuevas que en palabras de José son testimonio de resistencia de La Revolución Maya del Siglo XIX. Así se conjuga todo lo que sucede en KO’OX Túukul KO’OX BOOM. Poética rural, con resistencia que vive en el corazón de esta pacífica tierra fértil.
Lo que me impresionó cuando visité el taller fueron muchas cosas. Para ser breve podría mencionar tres: la vocación formativa que tiene; las miras al mundo entero; y la dignidad con la que traza la mezcla de mundanidad y poesía que lo rodea.
José es un artista egresado de la Escuela Superior de Artes de Yucatán (ESAY). Fue discípulo de la maestra Gerda Gruber y actualmente es uno de los artistas yucatecos con más proyectos en el extranjero en puerta. Para ser breve, tiene tres exposiciones en lo que viene de este 2023, una en Chicago, otra en Alemania y una tercera en el museo Amparo de Puebla.
En paralelo tiene un grupo de estudiantes que acude al taller a trabajar y concebir lo que es Arte. Todas y todos naturales del hermoso municipio de Dzán.
Es así como está experiencia circular y apolínea llega a una conclusión. Esperando ver mucho más de KO’OX Túukul KO’OX BOOM y José Chi Dzul. Y esperando que los yucatecos también miren —como el mundo— lo que está realizando este avezado artista. Ya que deconstruyendo las palabras de Antonio Mediz Bolio: “de la tierra del Mayab profundo salen voces que nos hablan”