Lo importante de saber mirar atrás

Sergio F. Esquivel: Lo importante de saber mirar atrás.

|
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram

¿Qué estabas haciendo hace exactamente un año? A ver, hagamos una pequeña pausa para realmente pensar en ello. Estábamos arrancando el 2022 y tenías metas y objetivos claros, pensabas que la vida iba a transcurrir en cierto sentido, con muchas expectativas, pero la vida cambia todos los días. En un instante aparecen pequeños o grandes cambios que construyen una nueva realidad. De un año a otro, los cambios son aún más drásticos, pero tal vez estés de acuerdo conmingo en que nada ha cambiado tanto, como estos últimos años.

¿Cómo eran las cosas en tu vida hace un año? Piénsalo un poquito, sincérate, baja la guardia. Revisa todas esas cosas importantes que dejaron de serlo. Todo aquello que no existía y ahora es parte de tu realidad de cada día. Enlista todas esas cosas que eran certezas y ahora son sólo recuerdos. Piensa en todas las personas que eran parte importante de tu vida y ahora no lo son más. Haz una lista de todas esas personas que llegaron a tu vida a sumar cosas buenas durante este año. Las rutinas que dejaron de serlo, los paisajes que cambiaron de color, las ideas que dejaste atrás. Revisa todo lo que se ha transformado en ti.

Hoy puedo decirte que mi mundo es muy diferente a lo que era hace un año o dos. El escenario cambió por completo. En lo personal, en lo familiar, en lo profesional. En mi forma de entender la vida. Casi estoy seguro de que, de alguna manera, para ti se ha transformado. Para todos realmente.

Existen, por supuesto, cambios que tienen un impacto negativo en nuestras vidas, como también muchos que tienen uno positivo. Aun así, tendemos a resistirnos a ellos porque así es la naturaleza humana y cambiar nos genera cierto temor. No nos gusta, pero el cambio es inevitable, a veces puede ser gradual al punto de pasar casi desapercibido y no nos damos cuenta hasta que miramos atrás y comparamos realidades.

El crecimiento y desarrollo personal de cada uno de nosotros nace precisamente de estos cambios. Nace de nuestra capacidad de modificar nuestra forma de ser y actuar ante un mundo que se transforma. Nace de saber ser flexibles, de adaptarnos y adquirir nuevas competencias. De la apertura que tengamos para aprender una nueva forma de hacer las cosas. Nace de saber fluir y entender que el entorno está más allá de nuestro control. Que a veces hay que saber soltar de ese deseo nuestro de controlarlo todo. De darnos el tiempo de analizar, aprender y emprender de nuevo.

Esta es, tal vez, la tarea con la que yo me quedo de 2022. Tú tendrás la tuya. Y será cómo tú: única y diferente.

Te invito a que te regales unos minutos para pensar en ello. Y más allá de los festejos, las uvas y los abrazos, podamos darle un sentido más amplio al cambio del calendario. 

Lo más leído

skeleton





skeleton