Escribir para las y los niños de hoy debe ser bien complicado, afortunadamente hay escritores dedicados a contarles las historias más divertidas que les encantan y los pueden enamorar de la lectura desde pequeños.

La literatura infantil y juvenil tiene ese propósito, y es casi seguro que un lector que se forma en la infancia lo será toda su vida. También es seguro que todo lector que encuentra a un escritor que le encanta lo va a leer en todos sus libros, a mí me pasa con Luis Bernardo Pérez, al que llegué primero a través de sus minificciones y después fui descubriendo su faceta como escritor de literatura infantil y juvenil; tiene varios títulos ya publicados con la editorial SM en la colección para las infancias “El barco de vapor”, como el de “Cuentos para los días de lluvia” y “Sombras en el jardín y otras historias escalofriantes”; también su libro “Biip-biip. Historias robóticas” fue incluido en la colección Biblioteca Centenaria de la SEP.

La narrativa de Luis Bernardo crea una atmósfera en la que, tanto niños como adultos, nos sumergimos con total complicidad para dejarnos contar historias que se tejen con los cuentos populares tradicionales, la modernidad y el mundo y sus complejidades convirtiendo al lector en cómplice para desenmarañar, en ocasiones, junto con el narrador, la historia que es compartida. Luis Bernardo es un gran escritor comprometido con la literatura que tiene una pluma tan versátil que un día puede escribir para los más pequeños o puede hacerlo para los adolescentes con sus novelas como “Tinta y ceniza” (Ed. SM) o “El extraordinario caso del tigre eléctrico” (Ed. Planeta lector), su más reciente publicación, y otras lo hace también para los adultos con la minificción y sus cuentos, de este género mis preferidos son “Fin de fiesta y otras celebraciones” (Ed. Ficticia) y “Papeles de Ítaca y otros destinos” (Ed. Océano).

En todas sus obras prevalece su humor sutil y fino, su prosa ágil, elegante y misteriosa como la personalidad de un felino, que invita al lector a quedarse y a permanecer hasta la última página. En “El gato de humo y otros felinos extraordinarios” el autor engancha a niñas y niños y a todos los amantes de los gatos; son once historias fascinantes donde claro, los gatos son los protagonistas, el centro de atención, como en la vida cotidiana para quien sea que tenga un gato. Desde una gata blanca muy estirada, hasta un gato negro que no quiere provocar mala suerte, o un gato pianista que da conciertos, hasta un gato de humo medio malvado, son algunos de los felinos que veremos desfilar en estas páginas que acompañan las ilustraciones de Juan Carlos Palomino. En este libro se aprecia el amor a los gatos y el deseo vehemente que tenemos todos los que poseemos uno o más, de venerarlos; incluso creo que este libro está hecho para leérselos a los gatos, háganlo, a ellos les encantan los libros.