Siempre se nos ha dicho que el hombre es gregario por naturaleza, es decir, que tiende a agruparse con otros para distintos fines. Al principio era por supervivencia, después surgieron otros aspectos que nos hacen reunirnos con quienes compartimos gustos, afinidades o una profesión. Este es el caso de la Armada, que nos ha permitido hacer una larga travesía en la que ahora, como en muchas ocasiones, hicimos el “rendez vous” con varios compañeros en los buques, unidades de infantería o establecimientos navales. 

Ese deseo gregario, que en la Marina llamamos espíritu de cuerpo, nos da un sentido de pertenencia, porque somos parte de una estirpe que nos ha permitido anclar en el puerto de abrigo que es nuestro hogar y lugar de residencia final. Muchos aún seguimos “dando golpe”, otros añoramos las singladuras logradas en las travesías a bordo, en los cuarteles o en las dependencias en tierra donde dejamos la mayor parte de los años y forjamos grandes amigos, y a cambio recibimos una formación, doctrina, tradiciones y valores de los que nos sentimos orgullosos. 

Con ese objetivo nace la Asociación de Retirados de la Armada de México en Yucatán: estrechar los lazos fraternos entre sus integrantes y con otras agrupaciones afines, fomentar y exaltar el espíritu marinero, conservar y difundir las tradiciones navales, además de ofrecer y proporcionar orientación y apoyo a los socios en relación con sus haberes de retiro y otras prestaciones que por ley les correspondan. 

Es nuestro deseo que esta naciente agrupación en el puerto de Progreso contribuya a esos fines y que los compañeros en situación de retiro encuentren aquí el apoyo que requieran, porque soplan buenos vientos que auguran una buena travesía a esta Asociación de Retirados de la Armada de México. 

Esas fueron las palabras que expresamos el pasado miércoles por la mañana en que nos dimos cita en la primera reunión de esta agrupación, convocados por quien capitanea este proyecto, el vicealmirante en retiro Genaro Watla Silva, a quien conocimos en 1985 siendo él segundo comandante del Cuerpo de Alumnos en la Escuela Escala de Mar de nuestra alma mater, el Centro de Capacitación de la Armada en Veracruz. 

El icónico faro del puerto, con sus instalaciones que han comenzado a ser remozadas para albergar a la Asociación, dio la bienvenida a los almirantes, capitanes y oficiales que asistieron en buen número esa mañana soleada; para algunos fue un reencuentro con compañeros y mandos de antaño, en un ambiente de camaradería porque, como dijera el escritor Pérez Reverte, hablamos el mismo lenguaje del mar. 

Luego de conocer los planes y objetivos, los presentes manifestaron su beneplácito de pertenecer a la agrupación donde, como rezaba un cartel de bienvenida, se busca que reine la hermandad y la unión, se respete a la familia, se practique la lealtad y la amistad, se profese un gran amor por la Marina de guerra, pero sobre todo un inmenso respeto a nuestra bandera. 

Ciertamente, como indica el lema de la Asociación: “El mar nos mantiene unidos”.

Anexo “1”

Ruta marítima Veracruz-Yucatán

La naviera Baja Ferries mantiene su proyecto de arrancar la ruta marítima entre los puertos de Veracruz y Tuxpan con Progreso. Se tenía previsto iniciar operaciones en abril pasado“ofreciendo una solución multimodal puerta a puerta de la mano del autotransporte que realizará la primera y última milla, con un solo documento de embarque y contenedores propios de 20 y 40 pies”, según declaró Alberto Montemayor, director de Desarrollo de Negocios de Baja Ferries, en una entrevista publicada en febrero de este año en el sitio web portalportuario.cl.

Agregó que para ello se realizaban gestiones para las dos embarcaciones que tendrá la ruta y estén en condiciones de realizarse con dos viajes a la semana, además de instalar oficinas corporativas en Mérida y la disposición de los contenedores, de los que ya se tenía una flota de 700, entre otras acciones.

Seguramente pronto se dará a conocer información al respecto porque Baja Ferries, que cuenta con dos rutas entre Pichilingue (La Paz), BCS, y los puertos de Mazatlán y Topolobampo en Sinaloa, recién inauguró otra entre Santa Rosalía y Guaymas, en Sonora.

Cuando se anunció esta ruta marítima en julio de 2019, se consideraba que comenzara a operar el primer trimestre de 2020, pero se requiere un parque logístico en la carretera Mérida-Progreso, porque, solo para dar una idea, en Mazatlán los transportes comienzan a embarcar en el ferry que va a La Paz desde la mañana, y el buque zarpa por la tarde para amanecer en Pichilingue.