Dicen que todo funciona a base de pilas, de conexiones a la corriente, baterías que hacen que las tecnologías funcionen. Eso incluso en los seres vivos como las plantas que cargan energía directamente del sol, incluso algunos animales como los perros que salen y se echan a recibir su dosis de vitamina D. Dicen que la energía recorre toda la vida y la tecnología, tanto que, quien mejor duerme, es porque más energía ha logrado descargar.

Cuando escuché las premisas anteriores con mis oídos de médico occidental, me pareció lo más absurdo, si bien el cuerpo humano es una máquina impresionante ¿cómo puede ser que una energía sea la que nos haga funcionar? Pero luego, me di cuenta que hay energía en el potencial de acción de las membranas celulares, en la sinapsis de las neuronas y que incluso, a través del ciclo de Krebs, formamos ATP en la mitocondria. También recordé que el corazón requiere energía para latir por medio de impulsos eléctricos y que los miocitos de los músculos necesitan de carbohidratos para funcionar como gasolina del coche, o en otras palabras, como energía.

Entonces es posible que la premisa inicial esté correcta, el ser humano es pura energía y por ello es viable que la energía negativa acumulada requiera ser sacada del organismo para funcionar mejor. Durante la maestría de psicoterapia conocí un método terapéutico llamado bioenergética, parece de ciencia ficción, lo bueno es que soy un gran fan de las películas espaciales. En este tipo de terapia se liberan estas energías del Ser Humano por medio de masajes, estiramientos y posturas; lo cual no es tan descabellado si tomamos en cuenta que una contractura muscular es una inflamación que, por un cúmulo de energía, mantiene tensionado al músculo ocasionando dolor. ¿Podría ser está la cura de dolores musculares que ni una medicina ha logrado mejorar?

Ciertamente la medicina occidental es fabulosa, pero aún no logra alcanzar las maravillas que la medicina ancestral conseguía. La humanidad se ha mantenido a pie por milenios y no por medicamentos, estos nacieron apenas hace un par de siglos, así bien, en tiempos “menos civilizados” algo tuvo que ocurrir con aquellos chamanes, magos, médicos egipcios y estudiosos doctores que encontraron la manera de sanar el cuerpo sin tanta medicación. El órgano más poderoso es el cerebro, sin él, nada funciona.

Es posible que la cura a todas las enfermedades se encuentre justamente dentro de la misma persona, dentro de su mente o inconsciente ¿Se imaginan lograr hacer una mezcla entre la medicina occidental y las medicinas de antaño? ¿O juntar la medicina con el poder de nuestra mente y el control de nuestras emociones? Admito que lo anterior me emociona y motiva a conocer lo que como médico occidental he bloqueado.