Mejor el dolor… a sufrir
Juan Manuel González Ponce: Mejor el dolor… a sufrir
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Toda la vida hemos escuchado a la gente habla de dolor y sufrimiento como algo que sonara como sinónimo, cuando la realidad es totalmente falso. No solo no son sinónimos, sino que uno precede al otro.
En este caso, primero surge el dolor, y a su vez, de éste nace el sufrimiento. Lo curioso aquí es esa pequeña línea delgada que divide el uno del otro, pues no pueden estar tan opuestos, siendo que nace uno del otro.
El dolor parte de lo anímico y emocional, y el sufrimiento parte del dolor, lo cual nos indica que mucho dolor en mucho tiempo provoca sufrimiento. Aquí te menciono 5 diferencias entre el dolor y el sufrimiento:
- La forma de sentir: El dolor nace de algún acontecimiento que mueve nuestras emociones y sentimientos, o sea que se siente y nos afecta en el alma, en el espíritu. Por otra parte, el sufrimiento nace del dolor, por lo cual se convierte en algo que le pega al ego o al orgullo. Sentir por supuesto que está permitido, sufrir adquiere otras connotaciones que incluyen nuestro control.
- La verdad y la realidad: La verdad es lo que realmente sucede, por lo que el dolor es una verdad que te cambia, pues te hace más humano cuando cada vez que te hieres pasas por un proceso de sanación. La realidad, en cambio, es algo que tú crees que es y utilizas esto para pasar por un sufrimiento totalmente innecesario y que te hace actuar como si la vida no tuviera sentido.
- La percepción de la gente: Con el dolor, la gente empieza a percibirte como una persona que está pasando por un proceso y que en algún momento pudieras sanar. En cambio, en el sufrimiento la gente te percibe como alguien que está actuando en su modo de víctima y que solo lo hace para recibir consuelo de las personas, y en ocasiones hasta para llamar la atención.
- La forma de vivir: La persona puede sentir un dolor muy fuerte por alguna pérdida, pero no dejará de vivir la vida y de atesorar los momentos que haya pasado y que siga pasando con las personas allegadas a él. Reparte mucho amor. Los que pasan al sufrimiento, siempre vivirán con miedo y lanzando culpas a otras personas por lo que les sucede.
- Tu decisión de vida: El estar de un lado o del otro es como la decidas. El dolor es obligatorio, si alguien te importaba dolerá su partida, pero el sufrimiento es opcional, tú decides si quieres quedarte ahí recibiendo penas y lástimas o simplemente valoras lo que tienes para poder disfrutarlo al máximo mientras se te permita.
¡La decisión es tuya!