Llegó el momento de recuperar: la confianza para salir a la calle a realizar nuestras actividades, la tranquilidad de que la pandemia de coronavirus está siendo controlada, retomar nuestro ritmo de trabajo para realizar las cosas pendientes, y todo lo que normalmente hacemos.

Recuperar es lo que hacen muchas personas en el campo de los desechos domiciliarios o municipales, comerciales e industriales. Tuve la oportunidad de visitar una planta de recuperación de desechos y quedé sorprendido ante la magnitud de estos procesos de recuperación, convirtiendo lo que muchos considerábamos basura en materia prima para nuevos procesos de manufactura.

En una de estas plantas fui atendido por el Sr. José Luis Gómez Carrillo, experto en el tema, quien amablemente me explicó cómo se desarrollan algunos de estos procesos de recuperación de desechos.

En esta importantísima actividad intervienen muchas personas, desde el triciclero que recoge de casa en casa los desechos, las pequeñas bodegas que se los compran, el transporte a los centros de acopio, que son bodegas de gran capacidad, en donde empacan el material o le aplican cualquier otro proceso para comprimirlos y reducir su volumen, los transportes pesados que los trasladan a los recuperadores, donde grandes maquinarias configuran los productos para entrégalos como materia prima recuperada a los fabricantes de diversos artículos.

Toda esta cadena de actividades ocupa a miles de personas en cada uno de sus movimientos, convirtiendo esta tarea en una fuente de ingresos para las familias de los encargados de realizarlas y lo que es sumamente importante es que no vayan estos productos de desecho a los rellenos sanitarios y tiraderos a cielo abierto, generando el ambiente para que se desarrolle fauna nociva y ocupando grandes espacios que reducen su tiempo de vida útil y contaminan los mantos freáticos.

Esta actividad debe ser tomada muy en cuenta por los gobiernos y otorgar estímulos fiscales y de otra índole social, para que no sea una ocupación de último recurso, sino una importante fuente de desarrollo en esta nueva etapa que se inicia el planeta.

La basura no existe hasta que mezclamos productos que podrían ser recuperados, convirtiéndolos entonces en… BASURA, aun cuando podemos obtener por ellos cualquier ingreso por pequeño que sea, e integrarnos a esta importante cadena que es una insoslayable vía de salvación para el planeta.