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Gran número de personas me pregunta cómo es que surgió Mi Retiro y Pensión; le cuento.

Corría el año 2010 cuando me sucedieron varios hechos significativos; uno de ellos, es que ya empezaba, como todas las personas, a interesarme por mi futura pensión; el otro acontecimiento fue que me dan la oportunidad de incorporarme como instructor en seguridad social, para una institución financiera nacional.

Ya dentro de la empresa, empecé a analizar mi trayectoria laboral para saber qué tan preparado estaba para cuando llegara la edad del retiro que, al igual que toda persona, pensaba hacerlo al cumplir sesenta años de edad, pero cuál va siendo mi sorpresa que, a esa edad, solo tenía cotizado cuatrocientas ochenta y dos semanas.

Evidentemente que, con esa cantidad de semanas cotizadas, mi ingreso a laborar para la institución financiera que me había contratado me venía como anillo al dedo, pues me daban Seguro Social.

Analizando también qué tan grande sería mi pensión, y ¡oh! cruda realidad; mi pensión sería de apenas un salario mínimo; claro, siempre y cuando acumulara las semanas faltantes para llegar a las quinientas mínimas para poder disfrutar de una pensión, pero también reflexioné que la ignorancia y desconocimiento de la Ley del Seguro Social me estaba haciendo pagar una factura, demasiado cara, por desconocer las ventajas y beneficios de la modalidad 40, que bien pude haber pagado desde mi salida de las empresas allá por el año de 1996.

Coraje, rabia, impotencia, desesperación, culpa, reproche y perturbación fueron las emociones que se arremolinaron en mi mente, porque no podía aceptar que, por ignorante, estuviera en la condición de que al cumplir la edad de retiro, mi pensión sería la más baja posible para un Ley 1973.

Buscando la salida más positiva para esa situación, que bien sabía era la misma para millones de personas en este país, la rabia que sentía me impulsó a tomar una decisión: esto que a mí me pasó, por ignorante, no le debe pasar a muchos mexicanos y, por tanto, me imbuí tanto en el estudio y práctica de todo lo relacionado con pensiones IMSS e Issste, pero necesitaba un medio para que miles o millones de mexicanos supieran cómo emprender acciones que les llevara a obtener una mejor pensión, nivel y calidad de vida, especialmente en la vejez.

Fue así como empecé a tocar puertas en los tres periódicos locales de mayor circulación; uno de ellos, ni atendió mi llamado; en el otro, me recibían bajo condiciones que no podía cumplir, y de Milenio Novedades recibí una llamada la cual me decía que, a qué hora podría acudir a una entrevista con el Sr. Manuel Escalante Alcázar, en aquel entonces, director de información.

 

Continuará…

 

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